Tampoco es que Gran Hermano tenga toda la culpa de ello. Sí, en 14 ediciones siempre han habido castings rotúndamente exitosos, pero este año la cosa fue muy floja. Concursantes mueble que ni siquiera saben por qué se presentaron a GH, otros metidos dentro de la casa simplemente por tener algún tipo de relación con otros concursantes, y en definitiva una cantidad desorbitada de concursantes que no aportaban nada a la casa. Semana tras semana veíamos como se iban yendo los "pata negra" para meter a otros que no hicieron absolutamente nada. El año pasado, que también fue una locura en ese aspecto, por lo menos el casting fue bueno.
Y el peor Gran Hermano de la historia tiene una de las peores ganadoras. Una ganadora que, si bien es "correcta", no deja de ser la que gana porque no hay otro. Repito como ya he dicho mil veces que Susana ha ganado probablemente por su amistad y fidelidad con Argi, la "ganadora moral" si es que eso existe de este programa. De todas formas en el posicionamiento de Argi al final se decantó más por Igor, y estoy convencido de que a Susana le llamará un poco la atención ese amor casi de última hora entre los concursantes vascos.
Pero además, Susana ha ganado gracias a los demás. Como siempre digo, por sí misma, Susana no ha hecho gran cosa. Ha tenido la fortuna de verse metida en varios asuntos de la casa y ser protagonista directa o indirecta durante varias etapas del concurso, además del hecho de que ha vivido la experiencia completa y por mucho que nos digan que los reservas también tienen posibilidades cuesta creerlo salvo que te llames Judith y seas irresistiblemente maja. El momento más crítico de Susana fue cuando pasó todo lo de Danny (sí, el expulsado injustamente con una entrevista sanguinaria que ha sido maltratado por el programa) y consiguió gestionar todo más que aceptablemente. El programa fue el que casi sin querer otorgó el título de ganadora a Susana. Más tarde, parecía que se iba a apagar en la casa, pero la entrada de los gemelos (concursantes que despiertan amor y odio por igual) reavivó su protagonismo.
Susana no es mi favorita como podéis intuir, pero he de reconocerle cosas muy buenas como su personalidad. Llama la atención, y no es porque lo diga la Milá, que tenga unas ideas tan propias y no se deje manejar por nadie. No sólo eso, si no que además si no está de acuerdo con algo lo diga aunque eso le suponga quedar mal delante de los que la quieren y ella quiere. Lo vimos con Gonzalo cuando intentó alejarla de Igor, pero lo vimos sobre todo con su madre, que tras unos días de dudas al final acabó haciendo lo que le dio la gana con Gonzalo desoyendo el consejo materno de olvidarse de él.
La final fue malilla, pero eso sí que es común a muchas ediciones. Las finales de Gran Hermano, quitando la del año pasado, siempre tienen maneras extrañas de proclamar a los ganadores que, por una cosa o por otra, fallan más que una escopeta de feria. Ayer unos paneles por toda la habitación iban cambiando simulando una especie de cielo platónico. Al comienzo he de decir que me gustó, pero conforme fue avanzando la noche... esa Milá menina fue horrible. Aunque para horrible el inicio de la gala con la entrada de los fans de los finalistas. "Hola, somos tus fans", decían todos sin pasión alguna ante la cara de estupidez de los finalistas al no saber lo que estaba ocurriendo y sobre todo qué pintaba esa gente en el momento más crítico del concurso. La única que reaccionó apropiadamente fue Susana.
Raky fue la primera eliminada, casi de inmediato. Cuando la cosa se trata de votar en negativo nadie quiere que Raky sea expulsada, pero cuando la cosa se trata de votar en positivo para ganar este concurso es normal que su fuerza se disipe. Raky salió como pudo de una entrevista un poco más agresiva de lo esperada y que se cerró con un vídeo suyo de sus mejores momentos. Ojalá hubieran puesto más vídeos suyos así, porque los hay. Esos vídeos de machorra que son los que me gustan, y no tanto vídeo de Desi.
Desi, la concursante que entró y revolucionó el programa. Para la mayoría para bien, para mí para mal. Fue todavía más lamentable su final en la que no sonrió ni una vez y lucía como la Pantoja cuando va a los juzgados. Cara de folclórica que te mira y ni pestañea con el semblante serio pero por dentro está quemándote con ácido sulfúrico y echándote mil maldiciones gitanas. Desi quedó tercera, y su entrevista incluyó muchas barbaridades suyas con las que directamente se reía. Por supuesto, sus barbaridades no están a la altura de las que el resto de concursantes dijeron sobre ella los primeros días, pero eso no quita lo otro.
Igor quedó segundo y casi que gracias. El apoyo de Desi estuvo siempre presente y si llega a quedarse segunda a mí me da algo. Hubo un punto en el que casi quería que ganara Igor sólo por darle a Desi en los morros. Igor se tomó su derrota bastante bien, aunque todos sabemos que ansiaba ganar el programa. De todas formas dudo que por mucha campaña preparada en el exterior Igor llegara a plantearse cuando entró en la repesca la posibilidad de ganar este concurso. Si no fuera por Igor, GH 14 hubiera sido una basura.
Como era de esperar, parece que no va a haber Re-vuelta ni ningún lío extraño post-GH. Únicamente un debate la semana que viene donde volveremos a ver los mismos videos una y otra vez. Probablemente la última oportunidad de ver algo jugoso televisivamente entre Igor y Miriam. Este Gran Hermano ha dejado clara una cosa: es mejor una manada de frikis que una manada de muebles. Por mi parte nada más, agradecer a todos los que me habéis leído, incluso si no habéis dejado ningún comentario, pero también agradecer a los que siguen entrando por aquí a pesar de que odian Gran Hermano y saben que semanalmente doy la lata con él.