PRM 2018: LO PEOR DEL AÑO

Empezamos con los premios gordos. Hoy os dejo los premios a lo peor que ha pasado por El BloJ durante este año. Evitad estos juegos a toda costa.

A diferencia que con los premios específicos, aquí sí se han establecido rankings para cada una de las cuatro categorías. En la próxima entrada veremos lo mejor del año, cerrando así los Premios Raul Minero 2018. Recordad que en Twitter extendemos un poco más las explicaciones y prolongamos esta ceremonia bajo el hashtag #PRM2018.

¡Comenzamos!

Agony se lleva el primer premio, y no creáis que el segundo queda cerca. A las expectativas que tenía con el juego, lógicamente incumplidas, se le une un juego que no entiende al jugador, y que no sabe cómo conseguir hacerle disfrutar usando el terror como herramienta. El juego más incómodo que he jugado, con todos los elementos para ser la mayor bazofia que ha pasado por aquí en 2018.

Segundo puesto para The Dark Occult, un juego con un aspecto visual aceptable que contrasta con una serie de decisiones inexplicables. Tercer lugar para Suicide Guy: Sleepin' Deeply, una expansión con unos pocos niveles a precio de un juego completo. Cierra el ranking All Walls Must Fall, un juego al que le falta saber qué es lo que quiere.

Agony también se lleva el premio al peor juego indie que he jugado durante todo el año. Recordemos que esta categoría engloba juegos indie de todos los años que han sido jugados por mí durante 2018. Ya he dicho bastante de Agony, tan sólo puedo añadir que si hiciera un ranking de lo peor que he jugado en mi vida Agony no ganaría, pero sí aparecería en el top 10.

The Dark Occult repite segundo puesto, mientras que Ruiner hace acto de presencia como medalla de bronce. Un juego que depende 100 % de su jugabilidad y acaba siendo mala es una losa demasiada grande. Los comandos no reaccionan debidamente y es de esos juegos que te exige conocer sus fallos para poder asimilarlos y superarlos. Finalmente, Suicide Guy: Sleepin' Deeply cierra el ranking, más por su carácter de timo que otra cosa.

Esta categoría incluye juegos indies y no indies lanzados en 2018, y vaya, Sea of Thieves es un juego tan vacío que casi calificaría de vergonzoso que pueda existir algo así. Además de lo insultantemente vacío que está, se le une el hecho de que no he podido jugarlo debido a un bug insalvable. La comunidad ha terminado abandonado un juego que se hunde sin salvación.

Ni No Kuni II se lleva el segundo premio, por las fuertes expectativas que tenía que no fueron cumplidas pero sobre todo por la cantidad de contras un juego que tenía muchas papeletas de estar entre lo mejor del año. Agony recibe el segundo lugar, por razones evidentes, mientras que The Dark Occult cierra el ranking.

El premio que nadie quiere llevarse. El peor juego que ha pasado por El BloJ. Sea of Thieves es un canto a la libertad, donde se espera que la gente se lo pase bien en un mundo vacío donde lo único que me suscitó fue un "qué maravilla el agua". Aquí está lo gracioso: me lo pasé bien jugándolo, pero no fue mérito del juego en ningún momento y sí de la gente con la que lo jugaba. Ni narrativa emergente ni lo que os quieran vender. Me lo pasaría igualmente bien con esos mismos amigos jugando a cualquier juego.

Segundo lugar para Ni No Kuni II y tercero para Agony. Este año los premios tienen mucha presencia de 2018, cosa que no suele pasar. Aparece como invitado especial Lost Planet 3 y ese juego infumable que enterró una saga que durante un tiempo se codeaba con el resto.