2022: MI MEJOR AÑO EN JUEGOS - EL BLOJ WRAP-UP

Creo que puedo decir, sin miedo a equivocarme, que 2022 ha sido mi mejor año en videojuegos de la historia.

2022 iba a ser un año bueno, pero ni siquiera yo esperaba que tan bueno. Ya de por sí, para la industria, iba a ser un año espectacular tras un 2021 un tanto más flojo, pero lo cierto es que los retrasos de algunos títulos importantes ha diluido un 2022 que, si bien ha sido bueno, se ha quedado un poco con una primera parte potente en aquel mítico febrero, y un tramo de fin de año también decente con buenos títulos. En resumen, un fantástico año, pero sin llegar a ser ese inolvidable 2022 al que nos agarrábamos en el más flojo 2021.

Sin embargo, por El BloJ ya sabéis que tenemos nuestro propio ritmo. El hecho de llevar una cola de títulos grande en espera hace que juegue a muchos juegos de distintos años, pero además, el hecho de disponer únicamente de PC, me aleja de títulos exclusivos y, en el mejor de los casos, títulos que llegan con algún año de diferencia. Por eso, como este tipo de usuario, se me han juntado una cantidad de títulos inolvidables en 2022 a los que quiero hacer mención como repaso de año, antes de que todo el mundo se ponga a pelearse en la gala de los Premios El BloJ, que llegará justo a finales de año. El hecho de que este año hayamos tenido la media de notas más elevada de la historia de El BloJ, también dice mucho de hasta qué punto 2022 ha sido bueno para mí.

Si tengo que señalar algo que ha marcado mi año, eso ha sido la saga Yakuza. Tras varios años esperando su llegada a PC, no ha sido hasta bien pronto que Sega nos ha permitido disfrutar de su saga completa fuera de consolas. Por eso, a día de hoy y pausando mi maratón de Yakuzas en el sexto -séptimo si metemos el 0 en la ecuación-, Yakuza se ha convertido en mi segunda saga favorita de videojuegos, siendo superada únicamente por Silent Hill. Por El BloJ os he dado la turra fuertemente no solo con análisis, sino también con varias entradas dedicadas a sus minijuegos y contenido adicional, que ya son un clásico en El BloJ. 2023 no va a cambiar demasiado en este aspecto, porque estoy deseando dar el siguiente paso y empezar con la saga spin off Judgment, que por fin llegó a PC tras sus anuncios en el Tokyo Game Show de 2022, además de adentrarme en el Yakuza 7: Like a Dragon al que tantas ganas le tengo. De todas formas, no me dará mucho tiempo a echar de menos a mi querido Kazuma Kiryu, ya que lo tendremos en el remake de Ishin en febrero, además del Gaiden, que sale también a lo largo de 2023 y que me muero por jugar. Si todo va bien, como veis, en 2023 tendremos la misma cantidad de Yakuza por El BloJ, con el objetivo de estar al día y prepararnos para la llegada del 8.

Pero 2022 también ha sido el año donde hemos podido, los usuarios de PC, catar las mieles de los exclusivos de Sony con más fuerza. En ese aspecto, el God of War de 2018 es un juego de 2022 en PC, y de momento, ha sido el único exclusivo de Sony que me ha hecho vibrar y sentir una verdadera punta de lanza a la hora de definir a Sony. También tuve tiempo para hacer los deberes y jugar a The Legend of Zelda: Breath of the Wild, un juego que no me caló tanto como esperaba, pero al que le reconozco todos sus méritos y que, de alguna forma, me ha dejado un poso que no esperaba tras su finalización.

Finalmente, desde tierras japonesas -he tenido un año muy oriental-, me emocioné como con pocas cosas en esta vida jugando a Final Fantasy VII Remake, uno de esos títulos que sale en diciembre entre puertas de año y que te trastocan todos los premios de cualquier página, siendo el caso de este juego la salida del mismo en PC en diciembre de 2021. Creo que puedo asegurar, sin tambalearme demasiado, que es mi Final Fantasy favorito de todos los tiempos, y que me extiende todavía más ese fanatismo de base que quedó tan marcado en nuestra generación con la salida del Final Fantasy VII original. En cualquier caso, fue el primer juego que jugué en 2022, empezado esa misma nochevieja de 2021 tras las uvas y saludos familiares. El año, sin duda, prometía.

El final de año no ha sido malo, desde luego. La guinda la tenemos con la salida de Persona 5 Royal en PC, tras media década de espera. No puedo deciros mucho más del juego porque se ha dado la particularidad de que no voy a completarlo antes de fin de año, pero dada la situación -esto es, más de una centena de horas jugadas cuando llegue fin de año-, creo que me perdonaréis si lo incluimos como un juego de 2022. Podéis profundizar sobre cómo va la cosa en las impresiones de Persona 5 Royal que publiqué hace unos pocos días.

Señalar que 2022 también ha sido un año muy destacado en lo que me toca en anuncios de videojuegos. Por un lado, lo que hemos comentado en tema de la saga Yakuza, pero por otro, juegos menores que ya espero con ansias como es ese Master Detective Archives: Rain Code, o juegos con más nombre como ese The Last of Us Part I que por fin permitirá cubrir otra de mis grandes lagunas videojueguiles, y que tendremos en marzo de 2023 en PC. Por último, no podemos dejar de señalar la importancia de la vuelta de Silent Hill en varios proyectos, como claro colofón de la fiesta personal que ha supuesto 2022 para mí, a pesar de que ninguno de estos títulos tiene todavía una fecha o vistas a salir inminentemente, y que me llevó a rejugar el primer Silent Hill en directo en Twitch. Directos que, por otra parte, me han llevado también a mi mejor año por el canal gracias a una gente maravillosa que noche tras noche ha disfrutado -espero- conmigo mi pasión por el mundo de los videojuegos, bien sea a través de los juegos o a través de las múltiples conferencias y eventos que hemos empezado a cubrir.

Por último, aunque 2022 ha sido el mejor año que recuerdo, no podemos terminar estas líneas sin señalar que hay un par de títulos que hemos dejado pasar y que claramente han marcado la industria este año. Uno de ellos, por tener que pagar la moneda del lanzamiento tardío en PC -por otra parte, no confirmado- de God of War Ragnarök. Otro, por no haber tenido el suficiente tiempo y, no me escondo, una potente pereza, que se ha traducido en no haber jugado a Elden Ring. Quién sabe, igual en 2023 os estoy contando lo estúpido que fui por haber dejado de lado el último y exitoso juego de FromSoftware.

Esto resume, o más bien verbaliza, lo más destacado de 2022 en cuanto a su importancia en mi vida. Lo tendremos todo más bonito y con más orden en la flamante gala de los Premios El BloJ a final de año, donde daremos tanto el premio al mejor juego lanzado en 2022 que he jugado, y también el premio especial al mejor juego que he jugado en 2022, sea del año que sea.

Gracias a todos por seguir haciendo posible tanto El BloJ como todo lo adyacente a él. Sin vosotros no tendría sentido. Con que 2023 me dé la mitad de todo lo que me ha dado 2022 quedaré contento.