SLIDER

20 oct 2016

The Evil Within

Hoy, en víctimas del hype:



The Evil Within es una de las mayores decepciones que he tenido no sólo en el año si no en décadas -milenios, me atrevería a decir-. Como muchos sabréis, el survival horror es mi género predilecto, y es extremadamente raro que por malo que sea el juego no me guste. No es de extrañar que después de ver las primeras imágenes de The Evil Within quedará más que entusiasmado, sobre todo al ver que iba a ser el primer juego de Tango Gameworks, la compañía creada por Shinji Mikami.

Llevo tiempo pidiendo un reinicio de saga de Resident Evil. Disfruté mucho el 4 a pesar de que fue el culpable de los Resident Evil modernos, pero a día de hoy la saga era 20 % terror y 80 % acción. Por supuesto, mi hype ahora mismo se ha trasladado a Resident Evil VII, pero esa es historia para otro libro. En cualquier caso, The Evil Within era la excusa definitiva para encontrar un nuevo rey del survival horror, un género que ha visto como sus principales gobernantes han abandonado el nido -Silent Hill, cuánto te echamos de menos-.

Shinji Mikami repitió por activa y por pasiva que quería volver a los orígenes del survival horror. The Evil Within no lo es, ni por asomo. De hecho, The Evil Within no es más que lo que debió ser Resident Evil 6. Un juego de acción, con más elementos de terror pero lejos de lo que cabía esperar. Curiosamente la primera parte es la mejor valorada del juego, cuando fue lo que menos me gustó. Mis niveles de frustración y decepción llegaron a un punto en el que hice un serio amago de dejarlo. Tan serio como que lo quité para no volver a ponerlo nunca más, pero al ir a enseñárselo a mi padre avancé un poco y... simplemente seguí hasta el final.

Así que la suerte que ha tenido The Evil Within es importante, y es que de haber existido el cuaderno de bitácora -las anotaciones que realizo de los juegos en distintos momentos del tiempo- hubiera tenido unos párrafos altamente hirientes adicionales. Como digo, el juego me fue a más, al igual que lo hizo la acción, lo cual es tremendamente contradictorio con lo que escribí al principio. Las partes de sigilo -que no están bien implementadas- se van olvidando, pero The Evil Within coge el desvío de la carretera hacia Silent Hill en lugar de seguir por el carril hacia Resident Evil, y claro, yo ante eso soy débil.


La historia no es gran cosa. El propio detective Castellanos es más que olvidable, y bueno, tuve el "placer" de vivir una de las partes más ridículas de la historia en un momento relacionado con unas gafas -si lo habéis jugado sabéis de qué hablo-. Shinji Mikami dijo literalmente que quería millones de preguntas y casi ninguna respuesta y que cada uno se forje su propia historia en la mente. No vas a entender nada. No, Shinji Mikami probablemente tampoco entiende nada. The Evil Within es el típico descenso dentro de una mente de pesadilla, y tiene ciertos truquitos aceptables, pero la historia en sí no llega a enganchar. Diría que no está mal, pero tiene todos los ingredientes para que se eche a perder tanto o más que la de Resident Evil. De aquí a dos o tres juegos de la saga, de haberlos -parece que sí-, nos empezaremos a encontrar con superhéroes voladores a lo Wesker. Ojalá me equivoque.

Esta belleza es sin duda alguna lo mejor del juego

Hay algo que debo premiar en The Evil Within, y es su coqueteo con lo aleatorio. Las municiones y objetos de supervivencia no están predefinidos, y van apareciendo en distintas cajas. Los enemigos también van de alguna manera rotando, y dentro de lo rígido del título hay momentos en los que puedes afrontar diversas situaciones de distintas maneras. Eso, unido a la escasez total de víveres y a su propia dificultad iluminan la bombillita del survival horror como género en The Evil Within.

Pero Tango Gameworks se equivoca en lo fundamental: que esto es un videojuego y que estamos ahí para jugar y pasarlo bien. De nada me sirve un diseño más que aceptable -también típico, pero bueno- si el juego es un despropósito de jugabilidad. Nuestro protagonista reacciona lento, se cansa a los dos segundos de correr -se puede mejorar, pero no deja de ser ridículo-, las hitboxes fallan en demasiadas ocasiones y en general el control es muy ortopédico. Tanto, que te hará morir una y mil veces por su culpa y no por tu falta de habilidad. Si os quejabais de la rigidez de control de los Resident Evil en The Evil Within es todo todavía más agonizante.

Hay algo más relativo a la jugabilidad que te llevará a querer tirar el PC por la ventana: la cámara. Esa maldita cámara que se sitúa en una perspectiva de tercera persona en la que el protagonista ocupa como 1/3 de la pantalla. De verdad, no se ve nada, y es un problema que se lleva arrastrando desde hace ya bastantes títulos de la saga Resident Evil -hasta en eso tiene cosas en común-. Una cosa incómoda de narices que no te permite disfrutar ni de los escenarios en su debido momento, pero que se traduce sobre todo en mil muertes por culpa de enemigos que ni ves venir. Es como vivir dependiendo únicamente del rabillo del ojo. La única claustrofobia que sentirás en The Evil Within es la maldita cámara.

Pirámide Cubo Cabeza

No sólo los controles y la cámara son insufribles la mayor parte del tiempo, también lo es alguna de las mecánicas del juego, sobre todo el sigilo. Un sigilo poco trabajado, como demuestra su propio DLC, y es que los DLCs de The Evil Within se centran en un sigilo mucho mejor llevado, con controles adecuados lejos de la experiencia del juego inicial. Probablemente lo del juego base sea un sigilo como concepto, que no se pudo explotar, y el DLC les permitió desarrollar lo que realmente tenían en mente. En cualquier caso, fueron pocas las veces que pude aplicar propiamente las ejecuciones sigilosas. Da igual, porque una vez la has ejecutado tendrás que gastar igualmente tu munición o tus cerillas para acabar definitivamente con el enemigo de turno.

Amo los survival horror y es la única razón por la que este juego no suspende, pero os puedo garantizar que en ese momento crítico en el que lo abandoné estaba bien suspendido, y formaba ya trío con mis juegos de renombre más odiados de todos los tiempos: L.A. Noire y Metro 2033. Gracias a Dios me remontó, aunque sólo fuera porque la frustración tornó en indiferencia. Eso sí, es un juego tremendamente largo para un survival horror, por lo que si os gusta lo vais a agradecer mucho.

The Evil Within recuerda como veis a muchas cosas, y es un homenaje en sí mismo. Cuando lo estás jugando se te pasa por la cabeza Resident Evil cincuenta veces, y cuando deja de hacerlo te suena Silent Hill cien veces. La diferencia está en que de aquí a diez años, cuando estemos jugando al survival horror nuevo de turno, probablemente a muy pocos les vendrá a la cabeza The Evil Within.


12 comentarios :

  1. Pues para la caña que le has metido durante la entrada, mucha nota le has puesto. De todas formas, por lo que he ido viendo, este juego parece que es de los que divide a la gente en 2 categorías: o les gusta, o lo odian. Yo por mi parte, los survival horror como que paso. Prefiero las Novelas Visuales, RPG y point-and-click.

    A propósito, ¿otro juego con una cámara que, más que parecer un elemento que está ahí para dar información, parece otro engendro con los que tenemos que lidiar durante toda la partida? Yo creo que lo de las cámaras aberrantes da para un top 50. Dios, empiezo a preguntarme mi existe algún juego con una cámara de esta guisa (detrás del personaje) que funcione bien.

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    1. Es que soy consciente de que es un juego que se me ha hecho muy cuesta arriba. Aunque en el fondo sean análisis muy subjetivos es cierto que hay una pequeña parte de objetividad. No puedo decir que sea un malísimo juego, simplemente uno que a mí no me agradó lo suficiente.

      Lo de la cámara de tremendo. Llevamos quince años con problemas en controles de cámara. Al principio era mucho más deprimente que ahora, pero todavía aparece un juego de vez en cuando que... XD

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  2. Lo cierto que cuando vi "Cubo Cabeza" no pude evitar acordarme de Pyramid Head, jaja. Como tú, comparto una gran afición por los survival horror, una género, que desde mi perspectiva, maltratado y olvidado en la actualidad. Jugué al Evil Within y mi opinión, digamos, que es mixta. La historia y su final me encanto, pero no me dio miedo en ningún momento, como si pudo hacerlos los primeros RE y SH. En cuanto a la jugabilidad, pienso igual que tu, demasiada rudimentaria. Aún así, el juego merece la pena.

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    1. Estamos huérfanos del género. Sagas como Dead Space entraron con fuerza y ya en su segunda entrega se echaron a perder. Silent Hill está abandonada. Resident Evil lleva dos entregas que rozan lo lamentable... Lo más parecido a un survival que he tenido ha sido el Resident Evil HD Remaster que por fin pude jugar en PC.

      Lo más triste de todo es que no creo que sea tan complicado sacar un verdadero survival horror que funcione. Hay un huecazo enorme y ninguna desarrolladora parece querer llenarlo.

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  3. SIn duda un juego anacrónico en mecánicas y planteamiento, aunque me parece interesante. Hace unas semanas que estoy jugando a juegos de la primera época de PS2, Xbox y GC y este Evil Within es un dejavu constante con sus surrealismos (aún no entiendo el porqué, si tengo una antorcha en la mano, no puedo quemar algo porque no tengo cerillas...) es un juego remisniscente de una época en la que las mecánicas estaban al servicio del concepto del juego y no al revés (tal y como hizo doom 3 en el que no podía empuñar linterna y pistola a la vez, para conseguir sensación de angustia, o en Quantum Break, donde todo se hace con los poderes del tiempo... incluso correr).

    Entiendo perfectamente tu nota... y siendo tú hasta me parece generosa ¿no te estarás ablandando?

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    1. En el fondo soy un romántico de los videojuegos!

      Todo resumido a una idea: The Evil Within sólo evolucionó en tecnología pero no en mutabilidad. Arrastra problemas de, por lo menos dos generaciones. Todo cuadriculado.

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  4. Este videojuego lo terminé hace ya tiempo y me gustó bastante. Me quedé con ganas de continuar con los diversos DLC que tiene, al menos dos de ellos parecían interesantes.

    Me gusta mucho el género, comparto tu nota aunque yo le daría un puntito más (7). Igual que tú, amo demasiado este género como para odiar la mayoría de sus juegos...

    ¡Un saludo! :D

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    1. Los DLC merecen la pena, al menos esos dos primeros que mencionas (el tercero ya es mucho más arcade y, a menos que te lo encuentres en un pack con los otros, no merece la pena. El DLC aclara la historia y mete mecánicas más desarrolladas que se quedaron a medio en el juego base, así que bien.

      Mil gracias por tu comentario :)

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  5. A mi antes me encantaban los juegos de terror pero desde hace tiempo estoy sensible a cualquier tema y lo he dejado aparcado (por diox! que tengo el Project Zero 4 por el principio!). No puedo comentar sobre The Evil Within porque tan sólo conocía de su existencia por el título y la primera imagen que has colocado en el artículo (inculta de mí que pensaba que era una película XD).

    Si te gusta el género de terror, ¿por qué no dedicas el siguiente AQQQJ a que te recomienden cosas terroríficas? Quizás encuentres alguna joyita que desconozcas.

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    1. Pues porque... el AQJQQJ anterior al que acabamos de tener fue precisamente de terror! Precisamente ganaste en aquél especial de Halloween de hace ya un añazo. Por si quieres curiosear un poco más estos son los juegos que me propusieron por aquel entonces: http://elblojdeneojin.blogspot.com.es/2015/10/a-que-juego-quieres-que-juegue-10_25.html

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  6. Me dan ganas de jugar sólo por las imágenes.

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    1. Hasta a mí me dan ganas de rejugarlo viéndolas. Luego me acuerdo de lo ortopédico que es todo y ya no.

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