Alan Wake

Ahora Doowap se llama Wakes.

Alan Wake es uno de los juegos que más ha enfrentado a sus jugadores en los últimos años, aunque he de decir que creo que la balanza se decantó más hacia el lado de aquellos que no lo disfrutaron. No es un juego fácil de asimilar, y estaba rodeado de tanta gente que decía que el juego era una basura que no esperaba que me fuera a gustar tanto (oooh, me ha gustado, no hay análisis sanguinario). Mi aventura con él comenzó gracias a conejito zombi que lo propuso en la edición especial de ¿A qué juego quieres que juegue? Gold Edition #1 aunque todos sabemos que lo iba a jugar tarde o temprano.

Dentro de toda esa gente que ha echado pestes de Alan Wake hay muchos tipos. Están los que de verdad no les ha parecido un buen juego, los que simplemente piensan que es aburrido y los que no han entendido un pimiento. Dentro de este último grupo, están los que no han entendido la historia, y ya en un nivel inferior los que no han entendido el juego y se han quejado de cosas totalmente sin sentido, siendo en realidad una queja contra su propio cerebro y no contra el juego sin que ellos lo sepan. He leído muchos análisis últimamente del juego y me he encontrado de todo, pero me llama la atención haberme topado con análisis tan malos.

Alan Wake perseguido por las críticas

"Alan Wake es aburrido". Esto se repite mucho y, sin lugar a dudas, es comprensible. Entiendo toda esa gente que piensa que Alan Wake es aburrido, y entiendo que se considere un juego repetitivo. Al fin y al cabo, Alan Wake es un poco como esas películas que te atrapan y despiertan tu interés enfermizamente. Si te parece aburrido, es muy difícil que salves todo lo demás.

Es un juego hecho para crear controversia. Un juego que pretende llenar foros de preguntas. Si uno ve el making of del propio juego se mencionan cosas como Lost. La gente se ha quejado mucho de su final, de su confusa historia y de las miles de millones de preguntas que quedan en el aire, pero no podemos olvidar que Alan Wake no es un juego cerrado, y en palabras de los desarrolladores "es la primera temporada". La cosa tampoco pinta fabulosa porque el juego no lo petó tanto como se esperaba y Remedy se ha embarcado en un nuevo proyecto, dejando a la franquicia en standby.

La historia es su principal baza. Si le quitas la historia el juego está muerto y enterrado, y eso es demasiado para un videojuego. Sin embargo, es de las pocas veces que no me ha importado anteponer la historia a la propia diversión. No me parece un juego aburrido tampoco (si no no le salvaría la historia por buena que fuese), pero muy lejos de los términos de acción que uno espera al leer Remedy (Max Payne). Además, no es un juego que reniegue de la misma, ya que si veis las estadísticas al finalizar el juego vuestra matanza ascenderá a cerca de medio millar de personas. No te habrás enterado, pero habrás hecho una carnicería que ni en Serious Sam.

El episodio 4 es el verdadero punto de inflexión

Alan Wake se divide en varios episodios (seis y dos adicionales) y el formato es el de una serie de televisión. Es aconsejable dedicar un buen rato a cada capítulo y pasarse el juego "en seis sentadas", dejándolo en cada final de episodio. Cada uno de estos episodios supone una especie de comienzo para el jugador, ya que se le despoja de todas las armas e inventario que tuviera encima. Me hubiera gustado algún episodio más, no alargando el juego si no dividiéndolo más ya que los episodios son considerablemente largos.

Perderse por Bright Falls es bastante reconfortante. Me recordaba a muchos sitios parecidos donde había pisado, con esos montes y precipicios tan pronunciados. La ambientación es tan buena que consiguió transportarme a dichos lugares (y me dio ganas de volver). Alan Wake es un juego que se disfruta despacio, asomándote por cada mirador y perdiéndote por sus caminos. El pueblo, también muy acogedor y muy Twin Peaks, es el clásico pueblo perdido de belleza natural enorme, donde todo el mundo se conoce y cualquier extraño es mirado con ojos de sospecha. Allí empezará Alan Wake su aventura, con el objetivo de recuperar su inspiración a la hora de escribir novelas perdida durante dos años, aunque se ve forzado a tener otros objetivos mucho más trascendentales nada más llegar.

Siempre queremos más de esto

El desarrollo es lineal, y la historia se basa en las páginas de un misterioso manuscrito firmado por Alan Wake que el propio protagonista se va encontrando en su locura psicológica. Páginas que anuncian en muchos casos lo que viene a continuación, hasta el punto de que más de una vez tuve la sensación de que me estaban metiendo spoilers dentro del propio juego. Aquí llega el primer gran punto negativo de Alan Wake, y es que no todas las páginas del juego se pueden encontrar en la dificultad normal, y tampoco podemos escoger de principio la máxima dificultad donde sí aparecen las páginas extra. Conclusión: hay que pasarse el juego dos veces para conseguir todo el manuscrito. Las páginas extra son complementos en su mayoría, "paja" que diríamos de un libro, pero aún así es bastante feo eso de ver que no tienes el libro completo y para ello tienes que repetir el juego.

Wake se verá amenazado en la oscuridad constantemente. Su principal objetivo será atacar a dicha oscuridad con objetos luminosos, siendo el más importante su propia linterna. Si fijamos la linterna en un objetivo, reduciremos su halo de oscuridad con el tiempo y, una vez arrebatado, ya podremos liarnos a tiros con el enemigo. No hay gran variedad de situaciones aunque se explotan adecuadamente y no da la sensación de ser tan repetitivo como dicen.

Más importante que la munición serán las pilas de la linterna. Esto requiere mención aparte porque es bastante gracioso. La linterna gasta pilas que no veas, chupa más que un coche de gasolina, el cual chupa más que una puta, la cual chupa más que una aspiradora. Las pilas se recargan solas con el paso del tiempo, pero en medio de la batalla no nos podemos permitir el lujo de esperar, así que lo que hacemos es insertar nuevas pilas y seguir con nuestra batalla. Estas pilas son Energizer, de la marca, tal cual. A ver... está muy bien que tu marca salga en un juego pero... ¿cómo de bien está que tus pilas se gasten en cuestión de segundos? No me extrañaría descubrir que este razonamiento fue el que llevó a Energizer a no aparecer en los episodios especiales sacados a posteriori del juego, cambiando la marca por una genérica inventada.

Hágase la luz

Ir hacia la luz es nuestro principal objetivo. La planificación del juego no me parece muy adecuada porque los primeros niveles son demasiado "feos". Luego llegamos a zonas mucho más reconfortantes que equilibran todo bastante. De hecho cuando lo estaba jugando temía que me iba a pasar el juego entre matorrales buscando sin sentido termos de café y páginas del manuscrito, luego no fue así. Y es que es muy incómodo ponerse a investigar en una zona de bosque, donde todo parece igual y donde da una pereza enorme aventurarse dentro y desviarse de la senda principal cuando encima los enemigos no dejan de aparecer hasta que no llegas al siguiente punto de control.

El único gran defecto que le veo al juego, más allá de cuestiones subjetivas de diversión, son los movimientos del señor Wake. Muy lentos, muy torpes y muy desesperantes. En Remedy querían crear a un personaje muy realista, y sobre todo enfatizar la sensación de que estamos manejando a un escritor y no a un veterano de guerra. Por ello, Wake será especialmente torpe, cosa que está hasta cierto punto bien, pero está también tan centrado en aportar realismo que se tardará cinco horas en coger una escopeta mientras estás rodeado de enemigos. Moriremos mil y una veces por errores del propio Wake más que por falta de habilidad, ya que además los controles a la hora de esquivar no funcionan todo lo bien que a uno le gustaría.

¡Poltergeist!

Le falta ingenio, y todavía más si habéis jugado a los dos DLC del juego que llevan la mecánica mucho más allá. Esos episodios especiales dejan un regustillo demasiado negativo a lo que pudo haber sido jugablemente Alan Wake. Tampoco es que sean perfectos, pero son bastante originales y por lo menos diferentes y de alguna manera integran narrativa y jugabilidad mucho mejor.

Podría estar mucho tiempo hablando del juego, de todas las cosas buenas que me encantaron y de todas las cosas malas que en el fondo no son para tanto. No sé la razón, pero caí pronto en los brazos del juego y disfruté una barbaridad de todo su universo (más allá del juego, todo lo que hay a su alrededor). A mí me ha encantado. De hecho ha sido el primer juego de Steam al que le he sacado todos los logros, y no me ha importado repetir varias veces secuencias en busca de los objetos coleccionables perdidos.

Estadísticas finales. Una verdadera matanza

Así que si ya de por sí hay que tener cuidado con lo que se lee por ahí, con Alan Wake hay que tener doble cuidado. Puedes encontrarte estupendos análisis que lo ponen a parir, pero también hay muchos de gente que simplemente rabia por no haber entendido ni una sola palabra, y no me refiero a la historia. Hace poco nuestro querido Sick publicó un muy interesante texto que trata Alan Wake desde un punto de vista diferente y que os invito a leer sin dudarlo. Puede que no sea un juego especialmente divertido, pero su experiencia me resultó más que maravillosa. Es más, cuanto más tiempo pasa más se asienta dentro de tu ser.