DIARIO DE UN GORDOCHEETOS #21 - MICROBASURA

Bienvenidos a esta especie de especial de microanálisis. La razón de que estéis ante esto es que últimamente he tenido demasiado tiempo libre fuera de casa y he aprovechado para tirar del random en Howlongtobeat. Los cuatro juegos que han pasado por mis manos son una auténtica representación de la basura que se mueve por Steam, y por ello, en mi biblioteca. Tapaos las fosas nasales que empezamos.

¡Sonic mal! Bueno, medio bien en realidad. Jugué el otro día a On a Roll 3D, un juego de plataformas que en imágenes se ve como una cosa terrible -sobre todo si has jugado a juegos de este tipo de los que hay un centenar en Steam- pero que luego, pues oye, sobrevive. Un par de horas de plataformeo básico pero con un toquecillo aceptable de creatividad -lo suficiente como para ver un toque de mimo- que bebe tantísimo de Sonic que no me extrañaría que una demanda pueda llegar a puerto si alguien de Sega acaba como yo: en una fría noche de invierno dándole al botón del random para que los dioses pusieran ante mí un juego cortito que jugar en dos horas de insomnio puntual. Probablemente si esa persona lo juega, se le quitarán las ganas de demandar a nadie gracias a la ternurita que desprende el título.

Claro, también es cierto que el de arriba es el mejor Sonic de la historia si después has jugado a Let's Zig Zag, un juego que ni siquiera da para juego casual de móvil y que estuvo en la tienda de Steam el tiempo justo como para que a mí me llegara una clave y lo haya jugado durante diez minutos. Dexion Games firma este juego donde lo único que hacemos es hacer un click para que una pelota cambie de dirección de izquierda a derecha, evitando caer por los bordes y haciendo zig zag hasta el infinito. Vio la luz en 2018 y Steam lo retiró de la venta. Ya sabéis cómo va esto.

Por lo menos, Vitatio 2 gana a todos en interfaz. Tiene pinta de que el menú les ha llevado más tiempo que hacer el propio juego en sí. Bienvenidos a los albores de internet donde existían aquellos juegos de llevar el puntero por caminos sin rozar el borde. Y no, esta vez no hay jumpscare, que eso sí que era el verdadero internet. 8 niveles y 68 logros, entre los que se incluye tener que repetir los niveles un montón de veces, porque bueno, 8 niveles que duran menos de un minuto no es precisamente la mejor tarjeta de presentación.

Acabamos esta tortura videojueguil con Caster, un juego de Elecorn que salió en 2009 y que se siente como una especie de Megaman en 3D con una música horripilante y algunas pequeñas buenas ideas en armas que modifican el entorno, y digo ideas porque lo que es la ejecución es de pena capital. El juego sólo empieza a brillar cuando tus armas se mejoran y te vuelves una máquina de matar, pero para entonces es justo cuando termina, y las misiones adicionales sólo sirven para recordarte por qué este juego te parecía, en todo momento, de suspenso.