Endless Fables: The Minotaur's Curse

Seguimos desengranando el género para ver qué tiene que ofrecernos.

He realizado la misma introducción ya cuatro veces, por lo que hoy no vamos a repetirlo una quinta. Podéis ver un poco mi evolución en el género consultando, por este orden, los análisis de Nightmares from the Deep: The Cursed Heart, Dark Arcana: The Carnival, Mythic Wonders: The Philosopher's Stone y Grim Legends: The Forsaken Bride.

Y ha ocurrido una particularidad para este Endless Fables que tratamos hoy y que, irónicamente, es el mejor análisis que podía haber hecho: me he olvidado de él casi por completo. Ha pasado un mes desde que cerré el juego hasta que he empezado a escribir estas líneas, y como digo lo he olvidado. Bueno, no es eso exactamente, es más que lo mezclo con todos los otros y ya no sé qué pertenece a cada juego.

Cada vez menos presentes, los objetos ocultos siguen siendo el pilar de todos estos juegos

Artifex Mundi lleva publicando el mismo juego muchos años a ritmo de uno por mes. Son buenos juegos, quiero que quede claro, pero también son idénticos entre sí. Este Endless Fables repite puzles y situaciones con demasiada frecuencia, o al menos recuerdo pensar eso mientras lo estaba jugando. Puzles de mover bloques para sacar un objeto, girar piezas para que encajen formando una figura, desatar nudos... puzles que en definitiva ya he visto en los anteriores juegos.

Endless Fables no ofrece puzles nuevos

Lo único que realmente cambia es su temática, por lo que las pequeñas diferencias en el gusto del jugador van en función de sus preferencias personales. Siendo el mismo juego, yo prefiero una temática más oscura a una más fantástica por ejemplo, pero el juego sigue siendo igual en todo caso. Sí que se nota un esfuerzo por mejorar la presentación. Cada juego que he jugado de una fecha posterior tiene más gusto a la hora de presentar la historia, aunque ésta tampoco es que cambie demasiado.

Repito, son juegos decentes destinados a un público muy concreto que sin duda se verá recompensado, y esa mezcla de objetos ocultos con aventura gráfica con diversidad de puzles y con una historia que solapa todo bastante bien lo convierte en una tanda de juegos muy jugables. El problema es que tendrás todo el tiempo la sensación de estar haciendo una rejugada.