Nos empapamos de historia del videojuego en este libro de Diego Vargas que publica Dolmen Editorial, y que nace como consecuencia del popular podcast de mismo nombre.
Diego Vargas nos trae, junto a un buen puñado de personalidades de la industria del videojuego española, un pedacito de historia que comprende los años 1981-1987 en lo que supone el primer volumen de una colección que pretende poner por escrito los pasos que dio la industria del videojuego en España. Este proyecto no es más que, dicho por el propio Diego Vargas en alguna entrevista que le he escuchado al respecto, trasladar la experiencia de su podcast -de mismo nombre- al formato libro, aprovechando el torrente de recopilación de información que el autor ha ido atesorando durante los años. En este primer volumen, tendréis los primeros pasitos de una industria importantísima para el sector, de cómo se empieza a importar el hardware con la adquisición de los microordenadores y cómo esto se traduce en una explosión de software, dando lugar a empresas pioneras como Dinamic, Topo o Erbe entre tantas otras.
No quisiera destripar mucho del libro, así que no vamos a hacer el clásico repaso de capítulos que suelo hacer en cada una de las reseñas que se van publicando. Creo que este libro es una historia contada, y no tiene mucho sentido agrupar los capítulos separándolos en contenidos.
A pesar de que el libro cuenta con su introducción, quedé sorprendido de lo tajante que es a la hora de empezar a narrar los acontecimientos. Esto, se prolongó a lo largo de todo el libro, y aunque me resultó durante un tiempo chocante, lo cierto es que acabé por entender el ritmo y tono que creo pretende Diego Vargas con su obra. En lugar de dar interminables contextos y presentaciones, lo que tenemos son un par de líneas que nos sitúan en ese preciso momento, para dejar, directamente, que todos los protagonistas hablen. Es una especie de formato de entrevistas, pero adaptado a una cronología, que va saltando entre unos y otros en lugar de ofrecer una visión personal. Es, por tanto, la visión global de un momento del tiempo, salpicada por diferentes impresiones, y no la de una única persona que te cuenta la historia.
Pronto me di cuenta de que esta estructura, ya os adelanto que acertadísima, se puede asemejar a esos documentales históricos donde vamos saltando de protagonista en protagonista, cogiendo las pinceladas exactas para darle un sentido narrativo al libro. Si alguna vez has tenido esa sensación a veces de estar viendo más una película que un documental, puede que en este Cinco Duros encuentres exactamente esas sensaciones trasladadas al papel.
Y en todo esto tiene gran parte de culpa la maquetación del libro, con una edición sobresaliente que fomenta la fácil lectura y los continuos saltos entre los protagonistas. El libro es capaz de conseguir, ya sea por la selección de colores o la inclusión de fotografías de quienes hablan, que no pierdas el hilo narrativo en ningún momento. Las apariciones de Diego Vargas son escasísimas, y siempre para hacer un apunte necesario de contextualización. En general, no es descabellado decir que, tal y como está el libro enfocado, parece la estructura de conversaciones de WhatsApp, lo cual le da un dinamismo atrapante. Tan solo eché de menos que, con cada nombre, apareciera algún subtítulo del cargo/profesión de esa persona, por contextualizar todavía más, incluso cuando al principio del libro se nos presenta con una pequeña biografía a cada uno de los entrevistados.
Cuando digo lo de "dinamismo atrapante" no lo digo por decir. Yo soy de una generación posterior. Si bien mi primer contacto con los videojuegos se remonta al Amstrad CPC 464, la realidad es que yo era muy pequeño para tener, siquiera, una calificación de hobby hacia aquello. Mi desarrollo se dio con la Master System II y, sobre todo, con la era de los 16-bits y en concreto Mega Drive, por lo que a mí toda esta época, digamos, cigotal de la industria, no me tocó tan de cerca. Lo que vengo a decir es que mi atención es superior siempre que se habla de aquellos años, e ir hacia atrás hace que me sienta un poco más fuera de lugar. Con todo y con eso, Cinco Duros me ha conseguido enganchar de la misma manera que alguien lee una novela. Diego Vargas me hace más de un parry en ese sentido, presentándome capítulos que podrían considerarse directamente sobre marketing comercial y ventas, lo cual me produce más resoplido que ilusión, para acabar convirtiéndose en mis pasajes favoritos del libro.
Creo que no hace falta decir nada más del libro, y creo que está claro hasta qué punto lo estoy recomendando. Es la mejor aproximación a un tema denso e imponente que se me ocurre. Solo puedo añadir que, si este primer volumen me ha gustado tanto, no quiero pensar a qué niveles quedaré satisfecho con las posteriores entregas, cuando las generaciones avancen y lleguen a mi contexto más nostálgico.
Podéis adquirir el libro desde la página oficial de Dolmen, a un precio de 24'95€.
Copia proporcionada por Dolmen Editorial. En ningún momento este hecho ha condicionado las opiniones aquí reflejadas.
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