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El universo Starship Troopers se mantiene con vida gracias a una especie de culto -donde estoy metido- que no olvida la sátira hiperviolenta que Paul Verhoeven nos dio en las salas de cine allá por 1997. Tras varias secuelas de ínfima calidad, alguna película de animación y algún que otro videojuego, nos plantamos en 2023 con este Starship Troopers: Extermination, desarrollado y publicado por Offworld Industries (Squad, Beyond the Wire) en fase de acceso anticipado.
La versión de la que estamos viendo este pequeño análisis/impresiones es la 0.4.0, por lo que algunos de los problemas -e incluso virtudes- que vamos a mencionar hoy pueden cambiar de cara a futuras versiones. Ya sabéis de qué va esto del acceso anticipado: jugar a versiones tempranas del juego antes de que salga en fase final, pagando un precio reducido.
Extermination es un buen ejemplo, aunque poco inspirado, de lo que debería venirnos a la cabeza cuando pensamos en un videojuego de la franquicia. FPS -prácticamente innegociable esto-, al que en esta ocasión se le suma un punto de estrategia traducido en un tower defense, lo cual se alinea perfectamente con las películas. Aunque se irán añadiendo modos de juegos, y se desbloquean nuevas vías conforme vas avanzando en el juego -medidores de experiencia que coquetean con el juego servicio-, la partida básica ofrece una parte de avance conquistando objetivos en una algo aburrida persecución de iconitos en la interfaz, una segunda fase de construir un entramado defensivo con pequeña gestión de recursos, y una fase final de proteger la instalación antes de acceder al punto final de extracción.
Así pues, en Starship Troopers: Extermination divide con cierta obviedad sus dos grandes partes, presentando un tower defense relativamente sencillo, acorde con la acción a tiempo real a la que nos vemos sometidos, y por otra parte un FPS simple, que consigue presentar en pantalla una considerable cantidad de enemigos pero no lo suficiente como para estar a la altura de lo que se espera de las megahordas de arácnidos que veíamos en la saga. También brilla por su ausencia la presencia de los cadáveres de los enemigos, y un FX a la altura que ayude con el gamefeel general.
Hay que entender que es complicado poner en pantalla la cantidad de enemigos y las montañas de cadáveres características de la franquicia, y sin duda los esfuerzos de futuras versiones deberían tenerlo presente, pero no puedo evitar acordarme del mediocre Starship Troopers desarrollado por Strangelite en 2005, que más allá del suplicio técnico y la fiesta de bugs -nunca mejor dicho- era capaz de dejar verdaderas masas de enemigos en pantalla.
A Starship Troopers: Extermination le queda un largo recorrido. También debería hacer un esfuerzo por mejorar la optimización, especialmente si quiere abrazar ese concepto de horda que debería estar más presente. Mi único consejo es que esperéis un poco más a que el juego, aunque quizá sea jugársela demasiado en el sentido de que estamos ante un juego multijugador y para entonces no sé hasta qué punto va a tener los suficientes jugadores. Es entretenido, pero de momento algo insuficiente.
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