InfiniPicross

A poco que me conozcáis, sabréis que esto de Picross es mi debilidad.

Pero debilidad fuerte, no cualquier cosa. Ahí está como prueba el análisis de Picross DS y de Picross 3D con sendas notazas. No es casualidad, y es que esto de Picross es un "pasatiempo" que me ha costado horas y horas de vida, y os lo dice alguien que también se ha dejado la mente en miles de sudokus de miles de formas.

Pero esto de "Picross" en realidad viene muy de atrás, incluso antes de que la era digital apareciera. Bajo el nombre de "nonograma" el objetivo es formar una figura a base de lo que podríamos llamar como píxeles en base a unas reglas muy concretas que, evidentemente, no voy a explicar ahora mismo.

Ejemplo de nonograma

Porque lo que nos ocupa hoy es InfiniPicross, un juego muy modesto lanzado en 2017 por ReverseImpact. Como pasa en tantos otros juegos no voy a valorar lo que es el juego en sí mismo, si no la presentación en términos de interfaz y posibilidades que ofrece. Para que lo entendáis más fácilmente, esto es como si analizara un videojuego del parchís, no analizaría lo que es el parchís en sí mismo, analizaría su presentación, aspecto visual y jugabilidad.

Dejando ya esto claro, vuelvo a repetir que el Picross en sí mismo es la bomba. Pero InfiniPicross... sabed que InfiniPicross es paupérrimo en cuanto a diseño, interfaz y menús en general y hasta destruye las bases del Picross porque no ofrece nonogramas como tal, si no simplemente puzles para solucionar que nunca forman ninguna imagen, y quieras que no eso le quita mucha, pero mucha gracia. La presentación es nefasta, el apartado visual parece de cuando se empezaban a programar juegos para ordenador y, en definitiva, hay tropecientas opciones mejores de cara a jugar Picross.

InfiniPicross no forma imágenes en sus puzles, a menos que te empeñes en ver algo

Y es aquí cuando Picross DS y Picross 3D me vienen a la mente. Unos juegos perfectos, con una presentación maravillosa y un sistema de progreso que hace que un juego con ese aroma casual me parezca a día de hoy un indispensable de Nintendo DS. Si no podéis acceder a ellos, bien por precio o por alguna otra razón, sabed que existen numerosos Picross para móviles y demás plataformas directamente gratuitos que son mejores que este InfiniPicross.

El juego permite configurar colores y apañar un poco la interfaz

Así que dejad de lado InfiniPicross si podéis. Llamarle juego es otorgarle demasiada categoría, y es que parece más un editor que un juego en sí mismo. Ahora bien, si lo tenéis en vuestra biblioteca de algún bundle o por cualquier otra razón, probarlo puede introduciros a un mundo muy atractivo como es el de Picross y los nonogramas -como queráis llamarlo-. No deja de ser Picross al fin y al cabo, aunque tenga la peor presentación posible.