SLIDER

17 nov 2018

Cuphead

El BloJ se viste de gala para presentar uno de los mejores juegos de todos los tiempos. Mis expectativas por las nubes. A veces el hype se queda pequeño.


Sabéis perfectamente que mi BloJ es un sitio duro, donde rara vez se ve un 8, y donde años después de escribir sobre cientos de juegos tan sólo uno de ellos ha llegado a tener un 10. Realmente no considero que mi BloJ sea un sitio duro. No es un BloJ donde el odio rezume por ninguna parte, y soy la persona que más disfruta de los videojuegos que he conocido. Esto que voy a decir suena fatal, pero no es que yo sea duro, es que el sector y la mayoría de blogs que leo son muy blandos a la hora de puntuar un juego. A mí personalmente, ver todo 10, ver todo 9 o incluso ver muchos 8 hace que la opinión de esa persona pierda fuerza, mientras que en el caso contrario, en mi caso, cuando veo que algún juego tiene una nota tan elevada me pongo en alerta. No me creo mejor ni peor por ello, cada uno tiene nuestra balanza y nuestro baremo, pero siempre he preferido ser así de estricto en lo que más me gusta, sobre todo atendiendo a la cantidad de títulos que pasan por mis manos desde chiquitito.


Ya muchos estaréis bajando la ruleta de vuestro ratón para ver qué ha pasado con Cuphead. Adelante, podéis mirarlo. No es el segundo 10 de la historia de El BloJ, pero he de admitir que durante bastante tiempo lo ha tenido. Este análisis como bien podréis intuir es más una justificación a por qué soy ese profesor desalmado que te suspende con un 4'5 o no te da la matrícula de honor con un 9'5.




Cuphead y yo nos enamoramos a la primera, fue un flechazo inmediato, y así se lo hice saber a todos aquellos que me rodeaban cuando el juego dio la cara en un trailer de 2013. Desde entonces, una larguísima espera que finalizaba en 2017 con su lanzamiento y un desarrollo que empezó en la mente de los hermanos Moldenhauer hace más tiempo del que es sano imaginar. A mí me tenían desde el principio, pero estamos hablando de un hype que acumulé durante 5 malditos años, porque acabé jugando al juego en 2018 gracias a unos bellos amigos que me lo regalaron.


5 años de hype, 5 años esperando a jugar a Cuphead. Era improbable que alcanzara las expectativas que tenía de él, y sí, pongo improbable que porque ha pasado. Creo que es la primera vez que pillo un juego con tantísimo hype y no sólo cumple las expectativas sino que las supera. Cuando empecé a jugarlo tenía un sentimiento de terror por saber que no habría manera de que Cuphead llegara a lo que tenía yo en mente. Ver cómo se supera esa expectativa tan gigantesca es algo que dudo que vuelva a pasar.


El 9'5 tan espectacular que veis es una mezcla de todo. Es una mezcla de lo que verdaderamente considero del juego, y también es un premio por haber superado esa expectativa. Sí, probablemente Cuphead es perfecto. Un 10 no me hubiera chirriado, pero he acabado por no dárselo porque realmente tiene algunas cosas a mencionar. Muchos diréis que simplemente me viene muy bien eso de "sólo he dado un 10 en El BloJ", pero quien me conozca sabrá que no es así.


Los Moldenhauer se jugaron todo a una carta. No suele salir bien, pero a veces hay finales bonitos


Cuphead es un muy buen juego para cualquier jugador, pero es a ese jugador que dice que "los juegos eran mejor en mis tiempos" al que le da una bofetada espectacular. Y todo ello se basa en una dificultad deliciosa, más dura para los que no han nacido curtiéndose en determinadas consolas e igualmente desafiante para cualquiera que se preste a saborearla. Porque su dificultad se saborea, porque hay aprendizaje en cada muerte y, sobre todo, porque lejos de querer hacer un juego difícil los Moldenhauer han querido hacer un juego basado en la concentración por encima de la habilidad. Sinceramente, aunque suena a utopía, considero que alguien con unas capacidades extremas de concentración es capaz de terminar Cuphead sin morir. Todos los ataques se anuncian a los cuatro bombos, y Cuphead no está interesado en matarte en ningún momento. Lejos de querer ser ese juego que aparece entre vuestros youtubers con "el juego más difícil del mundo", que al final ha ocurrido tal cual, el juego en ningún momento pretende ser un festival de comer vidas.


Claro está, lo acaba siendo. Prepárate para morir mucho en Cuphead y prepárate para hacerlo todavía más si pretendes conseguir todos los A+. El experto, tal y como lo digo en los directos, es un poco un paseo en comparación a obtener esa gesta. Pero prepárate para no frustrarte, para aprender algo de cada uno de esos fallos que siempre cláramente tú has cometido.




Varios tipo de disparos para diferentes aproximaciones, un disparo especial y un parry que supone medio juego. Aprender a hacer el parry es vital para tener éxito en Cuphead y además se acaba convirtiendo en lo más divertido. Se apuesta por un sistema clásico de acción run 'n gun que evoca a multitud de juegos pasados, y que divide el juego en peleas de bosses y partes de plataforma. Aquí es donde viene el primer gesto de incomodidad en el juego: se nota y mucho que la parte del run 'n gun ha sido metida casi por exigencia del feedback. Cuando apareció Cuphead y se hizo público que el juego iba a costar de una sucesión de bosses la gente se vino un poco abajo. Al final se ha hecho una pequeña mezcla inconexa de run 'n gun y bosses dispersos que, si bien es maravillosa por sí misma, no acaba de encajar en el engranaje. Sinceramente ahora que lo he jugado no me hubiera importado una mera sucesión de bosses, pero en su día fui de los que celebró la inclusión de niveles intermedios. No es que estén mal, es simplemente que la estructura se ve un tanto extraña.


Aunque como juego Cuphead ya vale lo que vale, si atendemos al resto de arte la calidad del producto crece exponencialmente. Animaciones dibujadas a mano cuadro a cuadro y que se apoya en grandes clásicos de los dibujos animados, banda sonora espectacular grabada en directo para potenciar el valor humano y que además se remezcla en cada una de tus partidas para que parezca que suene diferente, apartado sonoro sobresaliente y un homenaje continuo a miles de cosas relacionadas con el mundo de los videojuegos y de los dibujos animados de los años 30. Está todo a un nivel tan alto que no existen palabras para que os podáis hacer una idea.


Referencias a Swing You Sinners, Mad Doctor, Sinbad the Sailor y millones de producciones más


Cuphead mete un cooperativo de sofá que también pretende recuperar esa época pasada donde los juegos para dos jugadores se convertían en fiestas de sandwiches. Aquí llegamos a otro pequeño gran problema del juego: Cuphead no tiene online, y en un juego así, en los tiempos en los que estamos, es algo a mencionar. Sobre todo porque detrás está Microsoft, y no hablamos de un indie cualquiera que lo ha hecho bien. Es llamativo el hecho de que no haya online para jugar a dobles y sin duda pienso que es algo que los Moldenhauer no quisieron aunque pudieran. Sí que creo que se comentó que en el futuro se podría hacer, pero estoy convencido de que los hermanos responsables de Cuphead no querían estropear el juego con algún problema derivado del online, que no nos engañemos, siempre suele haberlo. Sin embargo, aunque no es algo que considere fundamental y entiendo que no esté metido, también es algo que no puedo obviar a la hora de valorar un juego tan redondo.




Hablábamos de la excelente animación, pero la cosa va más allá. El mismo diseño de cada uno de los bosses y sus minions es lo suficientemente maravilloso como para que te quedes con sus nombres. Suena estúpido pero es así. Cada enemigo es parte protagonista del juego y pronto te verás diciendo cada uno de sus nombres como si los hubieras conocido de toda la vida. El carisma que desprenden tanto tu personaje como sus rivales es sensacional, y no necesita ni elaborar una impactante historia para ganar profundidad.


Pero es que no sólo los personajes en su diseño tienen carisma, son las propias batallas las que lo ganan. Sin duda el parry tiene gran culpa de ello. Imaginad vuestro juego clásico de run 'n gun favorito y pensad en ese boss especial que es muy divertido aniquilar. Por diferente, por sensación de control en los mandos, por lo que sea. Pues imaginad esa sensación para todos los enemigos que aparecerán en Cuphead. Hay imaginación en cada uno de los bosses y la cantidad de horas que habrán invertido en cada nivel me da hasta vértigo. Es un juego que he terminado de todas las maneras posibles y que a día de hoy sigo jugando a pesar de que simplemente estamos hablando de batallas contra bosses.




Hay muchas más razones para disfrutar Cuphead. Desde hace años The Binding of Isaac ha sido mi juego indie favorito, pero a día de hoy, Cuphead es mi juego indie favorito de todos los tiempos, y sin duda entraría en el top 5 de lo mejor que he jugado nunca. ¿Y sabéis qué? Que Cuphead lo hace también que esto no es ni siquiera una sorpresa.



9 comentarios :

  1. He jugado un poco antes esto y me dejó con ganas de mucho más, aunque soy tan manco que no se si seria capaz de pasármelo. A ver si algún día me hago con una x1 o pc decente.
    No sabia toda la historia que tenías detras con este juego, por eso te lo propuse para el AQJQQJ. Pero supongo que no fui el único.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es maravilloso. No es un juego tan difícil como dicen, es un juego que requiere concentración, pero es tremendamente justo con el jugador. Además, tu que vienes de jugar tanto retro, tienes ese plus. No creo que se te haga muy cuesta arriba!

      Eliminar
  2. !Si,me costo pero ya llegué hasta el puto King Dice y sus putos minibosses¡

    Ahora en unos putos meses más puede que logre terminar este puto juego.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. King Dice es de mis favoritos! Seguro que acabas encontrando una combinación de minibosses que te resulte más fácil, verás como cae :D

      Eliminar
  3. La verdad es que tiene una pinta increíble. Este alguna vez lo quiero probar.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí por favor, a ti en concreto creo que puede encantarte!

      Eliminar
  4. Hace algunos meses le metí mucha candela. Además de ser hermoso es un título donde se nota el amor a este medio.

    ResponderEliminar