Pues vaya con uno de los juegos más esperados de lo que va de año...
Hace unos días decía que había abandonado dos juegos sin terminarlos y eso era algo más que inusual. El de entonces fue el Ghost Master, y hoy toca el otro, este Thief con el que tuve una relación amor-odio-amor-odio definitivo y que abandoné tras echarle varias horas de juego al sentir que estaba perdiendo el tiempo con demasiado descaro.
Jugad a Dishonored. Ése es el mejor resumen que se me puede ocurrir de mi experiencia de Thief. Todo lo que hace Thief lo hacía previamente Dishonored, y lo hacía mucho mejor. Esto no es motivo suficiente para dar de lado a Thief, pero es que encima hace cosas mal, y cosas muy mal.
Para empezar, mi experiencia con Thief fue muy personal. Empecé jugándolo sin más, y la verdad es que me gustó. Eso de ser un ladrón y convertir el juego en un simulador de pillaje estaba muy bien, sobre todo cuando te lo tomabas muy en serio como si tú realmente estuvieras dentro del cuerpo de ese insulso ladrón que controlamos. Esto fue sin duda lo que más me gustó, la inmersión derivada más de su propio estilo de juego que de la ambientación en sí misma. Así que avancé y... me empecé a aburrir. ¿Qué hice? Explotar precisamente eso que tanto me gustaba y convertir Thief en una experiencia diferente quitando todo el HUD y los indicadores visuales que te ayudan. Directamente convertí Thief en un simulador de ladrón.
Estaba muy bien así. De verdad, si jugáis a Thief y os gusta lo suficiente os recomiendo que probéis esa experiencia, sin poderes especiales y haciéndola realista. Lo que pasa es que después todo es igual. Es hacer lo mismo todo el rato, y aburre mucho dedicarse a robar todos los vasitos y anillitos que te vas encontrando durante tu aventura.
Y aquí nace uno de los problemas más primarios del género de la infiltración: los checkpoints. Thief permite grabar a mano, pero a día de hoy grabar a mano es como imprimir en blanco y negro. Tiene checkpoints, pero claro, en un juego como éste es imposible medir el tiempo que va a tardar un jugador en llegar de un punto A a un punto B. Algunos durarán diez minutos, otros una hora. Thief encima está repleto de objetos como digo pequeños a robar, que actúan un poco a modo de recompensa en forma de dinero para adquirir nuevas habilidades. El problema es que, al cargar el checkpoint, todos esos objetos se pierden y hay que volverlos a coger, por lo que la cosa se convierte en un verdadero coñazo. Hubiera sido interesante apostar por el doble sistema de guardado que utilizan ya la mayoría de los juegos, que incluyen un archivo para guardar el personaje y otro para el progreso de la aventura.
Digamos que es un juego que pretende durar treinta horas pero a las tres ya te ha ofrecido todo lo que tiene que ofrecer. Se enfatiza esa sensación con la narrativa del juego, absolutamente fea y más propia de un mod común que de un juego, digamos, triple A. No sé si la cosa mejorará después (tengo entendido que el final es muy malo), pero no hablo de la historia en sí, sino de cómo se cuenta. Además, los escenarios son tan amplios como confusos, y encima se te insta a robar todo lo robable, lo cual es mucho en escenarios demasiado grandes.
Pero todo esto son, digamos, males menores. Son cosas que van más orientadas a lo que cada uno le pide un juego. Por encima queda la sensación de repetitivo y soso, pero en concreción aparecen los problemas jugables derivados de un sistema de juego demasiado simple y a la vez lleno de fallos. No serán pocas las veces donde veamos como nuestro personaje no va de una plataforma a otra y muere simplemente por fallo del juego, u otras en las que seremos descubiertos porque al juego le da la gana. Son ese tipo de cosas las que convierten a Thief en un juego inesperadamente mediocre.
Los escenarios no sólo son excesivamente grandes como para recorrerlos, si no que encima son repetitivos y con falta de personalidad. La ambientación no está mal, atrae un poco su "mundo", pero luego todas las paredes parecen iguales, todas las calles iguales, y todos los callejones iguales, por lo que te acabas volviendo loco por mucho que intentes orientarte en una ciudad tan liosa como deprimente y gris.
Quizá si hubiéramos esperado Thief como un juego más no tendríamos esta sensación tan negativa. Como digo, Dishonored es el referente más cercano que tenemos, y es cien veces más divertido en todo lo que hace. En definitiva, un juego tan malo como su nefasta optimización, y no hablemos ya de lo que ocurre en arquitecturas de 64-bits.
Uffff... Vaya crítica. No diría yo que Thief haya estado precisamente entre los más esperados del año, por lo menos no en los grandes círculos, porque desde mucho antes de salir le daban críticas, sablazos, y rapapolvos a más no poder.
ResponderEliminarLa verdad, a mí me llama mucho la atención y por más críticas negativas que leo, sigue llamándomela. Podría jugar al Dishonored como dices, claro, pero eso si aparece en alguna tienda de segunda mano y a un precio decente (respuesta: nunca), creo que antes me encontraré el Thief a 5€ que un Dishonored GOTY XDD.
Ahora en serio, lo de que todo lo que ya hayas robado no se guarde con los checkpoints me parece un asunto bastante grave, pero bueno. Algún día lo acabaré jugando (los dos, espero), tengo cero prisa, y aunque realmente me llama la atención, no tengo muchas expectativas tampoco.
Esperemos que las sorpresas tan negativas como para no acabarlas se te hayan terminado por lo menos durante unos meses XDD.
Era bastante esperado en su sector xD. No era como un Uncharted 4 pero sí que fue de los más esperados y de los que más hype habían creado, pero luego pasó lo que pasó...
EliminarNo he jugado a ningún Thief, no sé si lo he dicho en algún momento, pero seguro que no está al nivel de los otros porque es un enorme coñazo xD
Escenarios demasiado grandes? Pues ya verás cuando juegues al 2 y al 3 xD
ResponderEliminarSeguro que son más variados y más coloridos al menos...
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