La Voz. Gala 11

-Inserte aquí una introducción genérica resumen de lo que llevamos de programa y lo divertido que es en ocasiones reírse de él a la misma vez que lo alabas porque te está divirtiendo lo suficiente como para recordar lo mal que lo pasaste este verano sin nada en la tele-.

Le han dado el GOTY a La Voz

Empezó Rosario, si mi memoria de pez no me falla. Jorge abrió la gala con otra de esas baladas suyas de sentirlas dentro. Las debe sentir tan dentro y las hace tan suyas que a mí no me dice nada. Es más, estoy harto de él. Jorge es el triunfito por excelencia, más todavía cuando recordamos que participó en una edición del difunto programa reencarnado en lo que estamos viendo ahora. Su actuación le valió, como no podía ser de otra manera, para ser el elegido del público, que sí que parece haber mejorado su gusto, pero Jorge es demasiado... cómo decirlo... típico, como para que la legión de fans del mismo corte no lo salve. La otra semifinalista es Angélica, elegida por Rosario, y que cantó otra canción con su voz tan peculiar caracterizada  por no haberse comido nunca un caramelo mentolado.

El mayor enemigo de Angélica y de Axl Rose

Emmanuel y Anabella no dieron más de sí. El primero no pudo dar el campanazo como la semana pasada y la segunda era una concursante de relleno desde el comienzo. Emmanuel al menos consiguió llevarse el piropazo de la noche con lo que le dijo Melendi, y a mí de todo el grupo era el que más me gustaba. Ni siquiera me gustaba como cantaba, pero era el único diferente. Anabella me sorprendió durante el principio de su canción, pero luego se volvió a torcer y demostró que esta un peldaño por debajo de todos los demás. El equipo de Rosario se cierra por tanto con Jorge y Angélica, dejando de manifiesto que Rosario es muy flamencorra.

Emmanuel Downey Jr. parece que lleva asas

No creáis que recuerdo quién vino después. Creo que el equipo de Bisbal. El elegido del público fue nuestro heavy de Isso, Rafa, que venció al mismísimo Paco Arrojo. Su interpretación de The Winner Takes It All de Abba no fue tampoco gran cosa, pero desde luego fue mejor que la semana pasada. Además, si por algo celebraba cada vez que aparecía Rafa en el escenario era porque no iba a tocar balada, que todos, absolutamente todos, tiran a la balada, y acaba siendo un programa aburrido y tristón. Esta vez Rafa tiró por balada, y su impacto fue menor. Es gracioso que destaquen siempre de él que sea buena persona, y que los comentarios siempre vayan en la línea de "lo ves con esas pintas y luego ves que es buena gente". Incluso cuando lo eligieron y el muchacho se puso a llorar Bisbal gritó "¡Pero mira eso!", como si de un animal de zoológico con el que están experimentando se tratara. Venció al favorito de la edición, Paco Arrojo, que fue salvado por David Bisbal. Tiene algo especial este hombre, pero tiene un vibrato horrible, o quizá no, pero como mínimo es un vibrato que usa durante toda la canción. No sé si serán los nervios o qué, pero llega a ser bastante incómodo.

"Así llora un heavy", titula Telecinco.es...

Brequette (lloremos) y Yanela han quedado fuera del programa. ¡¡Machista!! Brequette lo hizo bien, desde luego mejor que Paco, pero también entiendo que Paco es un favorito y que Bisbal se quedara con él era lo lógico. Yanela en cambio eligió una canción que no me gustó nada. Si algo me gustaba de Yanela era precisamente que, con todo lo cubana que es, tenía un gusto bien distinto a lo esperado de ella. Eligió una versión hiperlatina del I Will Survive. Para colmo, Yanela ha sido protagonista esta semana porque se ha "descubierto" que tiene un nivel de vida muy alto. La gente ha criticado que saliera en un programa hace ya un tiempo diciendo que se gastaba en una botella de champán cifras astronómicas. Yo no entiendo muy bien la polémica, y no sé qué tiene que ver con que cante mejor o peor.

Mi querida Wei mandándome amor por Whatsapp

Por cierto, podéis mandar vuestras fotos e incluso videos viendo La Voz con total libertad para que os suba entre corazones a las entradas. Wei ha creado un monstruo.

Malú presenció como Pau fue elegido nuevamente por el público, lo cual me parece raro. Su estilo no es algo que precisamente pegue fuerte, y no me extrañaría que existiera ya alguna teoría de que Pau pasa porque su familia se deja un pastón. Ya sabéis que España vota, sí, pero el poder económico de un concursante influye en cierta medida en dicha votación. Pau merece pasar, claro, pero me llama la atención que lo haga en nuestro país calorrito. Iolanda fue la elegida por Malú a pesar de su más que floja actuación. No sé que le ven a esta chica, como a Paula Rojo (a ver si es que tengo yo un problema con la gente joven...).

Un auténtico maludrama

Nuria, mi querida Nuria, que era otra de las concursantes que prometía elegir temas decentes, fue una de las expulsadas. Entiendo a Malú, que no la iba a salvar por tercera vez, pero no deja de darme pena. Rebeca no me da tanta, ya que tiene mucha voz pero nada más y en el fondo también eran relleno. Hay concursantes que se les ve desde el principio que no van a ganar. Es imposible visualizarlos ganando el programa.

La pornografía no pudo salvarla

Por último, Melendi esta vez no tenía sustos ni disgustos y se mantuvo toda la gala bastante sereno, e incluso aburrido. Es más, a veces parece que se ríe de todos. España salvó a Maika, después de que cantara Still Loving You de Scorpions con el guitarrista más de protagonista con su pelazo al viento y el ventilador al más puro estilo Steve Vai. Melendi, que parecía tenerlo bastante claro, eligió a Neus, que para mí cuajó la actuación de la noche, así que me congratula su elección.

Paula Rojo, que estuvo mejor que otras veces, fue la sacrificada. Su legión de seguidores (no sé la razón) no pudieron evitar que Maika le pasara por encima, y que Melendi eligiera a quien realmente lo merecía. Susana entraba también en el saco de concursantes relleno, aunque no tan exagerado como las dos anteriores que mencionaba, y tampoco pudo acceder a la ansiada semifinal. La canción que eligió nuevamente no le hizo un gran favor, aunque no fue tan grave como en otras ocasiones.

Melendi, casi a la misma altura que Dio, en la audición a ciegas de Neus

Aclaradme una cosa antes de que me retire a mis aposentos... ¿Es que nadie se pronuncia sobre el funcionamiento de la gala? Seguro que sí, pero no es que me dedique yo a investigar sobre lo que se dice del programa. Veamos... se abren los teléfonos para votar a los cuatro concursantes del equipo. Cantan los cuatro e inmediatamente después se cierran los teléfonos. ¿Vale para algo la actuación? Porque el último que canta no tiene ni de lejos el mismo margen para que la gente vote, y eso no me parece justo. Sin embargo, parece que da lo mismo, como podemos ver en el ejemplo de Rafa que cantó el último y venció al favorito. La conclusión va más allá de que España por fortuna sea más o menos justa durante el programa, y roza más la ridícula percepción de que da igual como cantes, lo que importa es caer bien.

KINGS OF METAL COMING TO TOWN

La gala fue bastante menos accidentada. De hecho no recuerdo un falló más allá de algún tropezón y resbalón, pero es que lo de la semana anterior rozaba la ciencia ficción. Para ciencia ficción por cierto la ropa de Jesús Vázquez, que esta vez parecía que iba con bata de andar por casa. Esto se acaba y la verdad es que se me ha ido en un visto y no visto. Tres meses han pasado, y la sombra de Gran Hermano vuelve a planear. Ya veremos cual será el siguiente programa que aparece por aquí... Tenía que haber pillado Gandía Shore desde el principio, que eso sí que da para entradas y para un blog entero.

Gandia Shore. Mi gran fracaso como humano