Assassin's Creed Syndicate

Si pestañeas un par de veces pasa un tren con cuatro nuevos Assassin's lanzados que no has jugado.

Día 1 (Tiempo de juego - Secuencia 3): Me está gustando pero creo que un poco menos de lo que me habían dicho. Soy el raro que disfrutó bastante de Unity. En cualquier caso, lo que sí veo es que es bastante feo. La revolución industrial británica no es el marco más atractivo visualmente en comparación con otros Asassin's. El tema de llevar doble personaje, de momento me gusta, pero la historia empieza demasiado directa. Parece a veces un spin off.

Llevo nada y menos en cualquier caso, todo puede cambiar mucho, para bien y para mal.

(Tiempo de juego - Secuencia 5): Ya estoy en el desarrollo del juego y, bueno, Syndicate está pagando los platos rotos de llevar unos diez Assassin's completamente iguales a las espaldas. Noto Syndicate especialmente incómodo de jugar, como si todo fuera muy estrecho y el personaje imantado no tuviera un control muy preciso. La cámara también me está agobiando un poco de vez en cuando en espacios cerrados. Dos personajes con carisma pero que todavía potencian más el hecho de no tener un contexto o historia interesante. La historia de la actualidad sigue sin evolucionar, yo diría que desde Assassin's Liberations.

Alguien ha estado jugando mucho a los Batman de Rocksteady en Ubisoft. El lanzacuerdas convierte a Syndicate en un Arkham City, y los propios combates acaban con combos de decenas de golpes, aunque lejos de ser el sistema tan preciso de los Batman. Fuera de esto y añadiendo carruajes que lo acercan más a un GTA -con misiones de asustar pasajeros incluidas-, ningún añadido jugable más.

Una de las noticias que más he celebrado en los últimos años fue el parón que se dio Ubisoft para reconfigurar su saga. Tan solo este Syndicate me faltaba por jugar, así que me relajé y dejé pasar el tiempo. Cuando quise darme cuenta, el al parecer fantabuloso Origins salió a la venta y, mientras escribo estas líneas, Odyssey ha sido anunciado. Mi relajación hizo que tuviera por tanto tres Assassin's en cola, y no podía permitirlo.

Con unas tremendas ganas de llegar a Odyssey empecé Syndicate, y claro, las consecuencias fueron evidentes. Syndicate se ha unido a la peculiar lista de Assassins que no he terminado al 100 %, en la cual tan sólo figuraba el Assassin's Creed III por infumable. Lo de Syndicate ha sido distinto, si bien he estado cerca de completar al máximo no encontré gran motivación para ello.

Syndicate es como una versión más relajada de Unity, la mamotrética quinta entrega de la saga principal. Menos coleccionables y más sitio para misiones secundarias y DLCs. Esto siempre es buena noticia, aunque no te privará de tediosas misiones repetitivas de liberar distritos para obtener su control. Se me hicieron especialmente pesadas y fue una de las cosas que no completé.

Curioso el movimiento de Ubisoft en Syndicate al ofrecer una experiencia de juego para un solo jugador. Adiós al online que además funcionó bastante bien en Unity. La idea era ofrecer una experiencia mucho mejor para el jugador individual, y ofrecer una campaña mucho más seria. Pues bien: ni de broma. Syndicate tiene una de las peores historias que he visto en un Assassin's Creed. No es sólo que la historia del presente prácticamente no avance, cosa que lleva pasando casi desde Assassin's Creed III, es además que la historia de los hermanos Frye no puede importarnos menos. Una historia más de templarios y asesinos en busca de un nuevo fragmento, pero con especial desinterés por todo lo que le rodea. Además, el hecho de que los gemelos Frye se topen con toda la tropa de personalidades importantes de la época -Marx, Dickens, Bell, Nightingale y cualquiera que puedas pensar- le resta seriedad a una historia deficiente.


Los hermanos Frye en sí mismos son buenos personajes, pero muy mal trabajados. Acaban siendo una caricatura de no sé qué. Las implicaciones jugables son más un alarde que una realidad. Evie Frye es cuidadosa, silenciosa y pasarás gran parte del juego usando su hoja oculta. Jacob Frye es menos delicado, y siempre está preparado para una buena pelea. Ambos personajes no comparten habilidades pero sí el mismo árbol, salvando un par de habilidades especiales que se reservan para cada personaje con el objetivo de diferenciarlos. La realidad es que con cualquiera de los dos puedes ser un depredador sigiloso y con cualquiera de los dos puedes eliminar a 100 enemigos seguidos. Eso sí, las misiones principales están prefijadas y no puedes cambiar de personaje.

Kudos para las misiones de asesinato. Syndicate prepara bastante bien las misiones importantes de asesinato que sirven de puerta a las distintas secuencias. Esta vez se incluyen "oportunidades de asesinato", junto a "oportunidades de ayuda" que harán que acceder a tu enemigo sea más fácil. Sí, puedes ir corriendo aniquilando a todo el mundo y clavarle aburridamente tu hoja oculta al objetivo, pero te estarás perdiendo parte del juego. Estas misiones tienen una clara influencia de la saga Hitman, aunque no os vengáis muy arriba porque está todo mucho más simplificado y cuadriculado. En cualquier caso es un primer paso hacia algo.

El juego no ha cambiado mucho su sistema. Parkour hacia arriba y hacia abajo como ya bien implementó Unity en su principal novedad. El cambio sigue demostrando que fue un acierto, aunque todavía le queda un poco más de pulirse. Está todo muy imantado, y en situaciones estrechas se hace más incómodo de jugar. Si optas por el sigilo rara será la vez que el juego te deje vendido, aunque el diseño de algunos mapas no acaba de ser el más propicio.

Los combates se han simplificado, y como dije en el cuaderno de bitácora al principio alguien en Ubisoft ha estado jugando mucho a los Batman de Rocksteady. Botón de ataque, botón de contraataque y botón de romper defensa. Con esto puedes alcanzar combos centenarios con cierta facilidad. Eso sí, desde el principio notarás unas animaciones terribles en el combate, prácticamente sacadas de dibujos animados que directamente te sacan de contexto. También notarás que tus posibilidades ofensivas se han reducido. Venimos de Assassin's con un montón de gadgets y de ejecuciones posibles. Ya en los primeros era posible matar silenciosamente con tu espada, por ejemplo. En Syndicate no puedes siquiera elegir arma.

Visualmente una gran decepción. Este Londres industrial se ve feísimo, eso es así. Además, Ubisoft le ha pegado un bajón a los gráficos enorme para que no se produzca el despropósito de lanzamiento que fue Unity. Londres además se hace más pequeña que aquella basta París. Preparaos para unos gráficos aceptables de día y terribles por la noche, con texturas muy mejorables y, esto es nuevo, secuencias de vídeo que parecen de la PlayStation 2. Eso sí, atravesar el Támesis saltando de barco en barco en movimiento, de lo mejor que se ha visto en la saga.


Las pocas novedades de Syndicate son interesantes. Destaca por encima de todo el lanzacuerdas que no es más que el lanzacabos de la saga Arkham. Pulsa LB (L1) para elevarte a los edificios. Esto hace que la escalada quede en un segundo plano, siendo posible subirse a atalayas directamente desde el suelo. Es una evolución natural, y se nota porque es algo que vas a usar tanto y vas a interiorizar de una manera tan tremenda que parece que lleva con nosotros toda la saga. Además de este lanzacuerdas que cambia directamente el juego en su estructura más básica, Syndicate se caracteriza por los carros, acercándolo a un GTA e incluyendo todo un repertorio de misiones basadas también en la conducción.

Fuera de esto ningún cambio, y he de reconocer que he aguantado mucho jugando al mismo juego durante unas diez veces desde que salió el primero. La fórmula agotadísima ha hecho que Syndicate pague los platos rotos y no me gustara tanto. La nota que veis reflejada tiene en cuenta por una vez cuestiones objetivas, pero mi experiencia con el juego fue bastante inferior. Eso sí, las ganas de Origins son todavía superiores. Me da miedo porque voy con demasiadas expectativas de un cambio radical.

Aquí tenéis el ranking personal de Assassin's Creed hasta la fecha -de lo que podemos considerar saga principal-.

1 - Assassin's Creed IV: Black Flag. Si no cojeara en historia sería casi el juego perfecto.

2 - Assassin's Creed: Brotherhood. Sentó la estructura de los nuevos Assassin's.

3 - Assassin's Creed: Unity. Por momentos roza lo mejor de la saga.

4 - Assassin's Creed: Rogue. Si no existiera Black Flag, sería de lo mejor.
5 - Assassin's Creed: Revelations. El juego que me reconcilió con Ezio.

6 - Assassin's Creed II. La contestación a las críticas sobre lo repetitivo del primero.

7 - Assassin's Creed Syndicate. La punta de una fórmula muy agotada. Muy dispensable.

8 - Assassin's Creed. Altaïr sigue siendo el mejor personaje de toda la saga.
9 - Assassin's Creed III. Imagina ser Mamá me gustó más.

Y aquí tenéis el resto de análisis de spin offs y similares.

Assassin's Creed Chronicles: China. Interesante nuevo sistema.

Assassin's Creed Chronicles: India. Se le ven más sus carencias.

Assassin's Creed Chronicles: Russia. El cierre de la trilogía acaba siendo el mejor.

Assassin's Creed: Liberation HD. Primo hermano del III, pero con poco mejor.
Assassin's Creed: Bloodlines. La sosez hecha videojuego portátil.