E3 2017: EA Play

Sin palabrería, que si algo me ha enseñado el E3 es que no hay que hablar mucho, empezamos con la conferencia de EA que abría el evento más importante del año en el mundo de los videojuegos.

¡Y cómo lo abría amigos! EA iniciaba su andadura con una especie de tamborrada para presentar Madden 18. "Que vayan saliendo todos los juegos de deportes y así nos los quitamos" se leía por Twitter. Esta vez EA no hizo un bloque para sus EA Sports, y los distribuyó durante toda la conferencia. Madden 18 estrena modo historia al igual que hiciera el año pasado FIFA. Entre medias se presentó contenido adicional para Battlefield 1. Por su parte, además del trailer de presentación ensalzando al señor Cristiano Ronaldo, pudimos ver que la historia de Alex Hunter en FIFA 18 continúa, y se presentó un buen vídeo con figuras del mundo del fútbol hablando del jugador -que, recordemos, no existe-. Todo esto fue presentado por Men in Blazers, un podcast sobre fútbol que desgraciadamente hicieron un ridículo bastante importante sobre el escenario, aunque no tengo el contexto suficiente como para saber si ese ridículo es parte de su naturaleza o realmente fue así.

EA Play 2017 in a nutshell

Pero si hablamos de ridículos hay que hablar del pobre Jesse Wellens, uno de esos influencers que fue el encargado de dar paso a Need for Speed: Payback. Era evidente que estaba fuera de su zona de confort, y presentó de la manera más nerviosa e inadecuada un título que era importante para EA. Por favor, no más youtubers en este tipo de eventos en estos roles. Os pido tan sólo treinta segundos de vuestro valioso tiempo para que veáis el momento en cuestión. Sobre el juego, no pinta mal, pero el trailer gameplay era un poco coñazo con tanto slow motion. Cuánto daño ha hecho Fast and Furious.

La conferencia subió el interés cuando apareció A Way Out, uno de los juegos que más han calado a lo largo del E3. Detrás de él se encuentran los responsables de Brothers: A Tale of Two Sons, y se vuelve a apostar por la dualidad. Era la primera nueva IP del E3, y había ganas de algo así. Por lo poco que sé, el juego es multijugador, pero igualmente tiene una pinta muy buena.

Se lanzaba inmediatamente después un teaser de lo nuevo de BioWare: Anthem. En la conferencia sólo vimos ese pequeño avance y se nos encomendaba a ver la presentación del día posterior de Xbox para ver puro gameplay. Mi opinión sobre Anthem me la guardo pues para la conferencia de Microsoft. Aprovecharon el momento de confusión para meter el último juego de deportes de la noche: NBA Live 2018, en línea con los anteriores.

Todo se ataba para dejarle hueco a Battlefront 2. A mí Star Wars me gusta, pero no excesivos niveles. En cualquier caso, el juego pinta muy bien e incluye un modo historia. Caras conocidas por doquier del universo Star Wars y un gameplay final de unos veinte minutos para recrearse. Éxito asegurado.

La conferencia fue bastante aburrida, bastante insulsa y sobre todo marcada por algunas situaciones ridículas que la hacían peor de lo que realmente fue. La estructura tampoco es que ayudara, con un escenario pequeño y algo claustrofóbico que además movía la atención por todo el recinto presentando juegos desde distintas posiciones. La idea puede sonar bien, pero la realidad es que tuvimos un festival de cabezas de espectadores mirando hacia atrás para poder ver al siguiente presentador colocado en la otra punta del lugar. Daba mucha sensación de pequeñez. Es curioso porque en el momento de acabar la sensación era que EA nos había cascado la peor conferencia de cuantas vimos en el E3. Ahora, a toro pasado y escribiendo estas líneas, sigo pensando que fue la peor, pero en cuanto a títulos no estuvo tan mal. Digamos que estuvo correcto, pero que la presentación en sí la acabó por hundir.