Firewatch

-What if a controlled fired gets out of control?
-Then someone gets fired!

Día 1 (Tiempo de Juego - Día 1): Completado el primer día de Firewatch escribo estas líneas. Probablemente sea muy pronto para establecer alguna opinión, pero aquí se realizó mi primera parada. Cuidado con lo que tenemos entre manos. Soy consciente de que suelo emocionarme mucho con el principio de los juegos, pero en Firewatch noto cosas distintas. Culpa de ello probablemente se deba a que adoro el trabajo del doblaje y la sublime ambientación.

Mi aislamiento sobre Firewatch ha tenido efecto -sí, casi me he subido a una torre de vigilancia en medio de un bosque para no escuchar nada sobre el juego-. Sin que haya pasado todavía nada, me he sentido tremendamente vulnerable hasta el punto de tener miedo en un entorno natural muy abierto, con una brújula, un mapa, una linterna y un walkie talkie con el que hablo con alguien que está a kilómetros de mí. No tengo ni idea de nada. No sé si estoy ante un juego de terror o ante una especie de thriller -parece más profundo que todo esto por la introducción-. Ni siquiera sé si el juego se abrirá más conforme avance o si seguirá un poco la línea de un walking simulator.

Tantos misterios como buenas sensaciones en este primer día.

(Tiempo de Juego - Día 77): No, no es que el juego dure 77 días, es que va saltando de tramos en tramos. No sé si llevo la mitad, pero creo que las piezas están posicionadas. Sí, Firewatch se ha abierto un poquito más, aunque la realidad es que se acerca al walking simulator. Andar es lo único que he hecho, con el fin de proseguir una historia que es interesantísima a más no poder. Como sospechaba Firewatch es un thriller, y responder a las preguntas que te vienen a la cabeza se convertirá en tu obsesión. Como dije, enorme trabajo de doblaje y la sensación de que puede tener múltiples finales basados en tus acciones durante el juego.

Vaya, mi instinto me falló y lo que se supone que era la entrada a media partida de Firewatch acabó siendo casi al final.

Se me hace muy duro hablar de Firewatch por varias razones. He dejado pasar varios días desde su finalización para escribir estas últimas líneas porque tengo la sensación de que lo que te acaba dejando el juego importa más que lo que sientes mientras lo juegas. Firewatch es como un amor de verano, como un paseo por tu alma, como un auténtico paréntesis dentro de una sucesión de sensaciones.

Por una vez el hecho de aislarme de un juego no me ha ayudado. Más bien todo lo contrario. Como habéis podido comprobar no tenía ni la más remota idea sobre el desarrollo de Firewatch, y eso me brindó grandes momentos pero acabó siendo un arma de doble filo. Cuanto más pinceladas doy sobre él tengo la sensación de que estoy estropeando más la experiencia de quien lea estas líneas y quiera jugarlo. En Firewatch cualquier cosa es un spoiler. Hablar sobre el género del juego ya es un tremendo spoiler. La verdad es que más que ganar visitas me importa que cuando lo juguéis encontréis una experiencia plena y no sesgada. Si por el contrario ya habéis jugado al juego y buscáis un poco de chicha -spoilers a porrillo-, os recomiendo encarecídamente este artículo de Con F... de Freak donde se analiza un poco lo que vendría a ser el "post-juego".

Tan sólo diré una cosa, Firewatch probablemente se disfruta más sabiendo un poco de qué va la cosa que habiendo hecho lo que yo: aislarme durante todo este tiempo para no saber absolutamente nada.