The Typing of the Dead

Gracias a The Typing of the Dead he conseguido escribir esta entrada en siete segundos y catorce centésimas.

Antes de meternos en materia, The Typing of the Dead es una modificación de The House of the Dead 2 original en donde sustituimos nuestras pistolas por teclados con los que acabamos con los enemigos. En pantalla figuran palabras y frases de todo tipo que debemos escribir antes de que el zombie de turno nos hinque el diente.

Miradles, todo serios con sus teclados asesinos

Éste era yo escreibeindo antest de jugar a The Tyiping of the dead.

Éste soy yo escribiendo después de jugar a The Typing of the Dead.

Bueno, no es tan así. De hecho últimamente noto que escribo peor y me trabo muchas más veces. No voy a deciros que The Typing of the Dead me ha quitado mis errores mecanográficos básicos porque no ha sido así. Pero no será que no lo he intentado ¿eh?, que yo me ponía en la posición que mandan los dioses de la mecanografía y todo, lo que pasa es que llegaban los zombies y me entraba el pánico y volvía a mi posición errónea pero cómoda para mi incorrecto ser humano.

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¿Que cuál es dicha posición? Una mezcla entre lo que debería ser (lo que veis arriba) y el WASD de jugador que mi teclado curiosamente tiene borrado. Sí, básicamente el dedo meñique en mi pose está de adorno, y la mano izquierda se encuentra más alejada del centro de lo que en teoría debería ser.

La milenaria técnica del aguilucho no os servirá en Typing of the Dead

Simple al empezar pero complejo al avanzar

The Typing of the Dead apuesta claramente por el humor como no podría ser de otra manera. A la ya absurdez que supone matar zombies a palabrazos, hay que unir los juegos de palabras y una gran cantidad de triquiñuelas que pretenden complicarte la vida en tu avance a lo largo de los distintos capítulos. Uno podría pensar que está ante un juego de matar zombies escribiendo lo que ve en pantalla, pero The Typing of the Dead va más allá y ofrece unas cuantas variaciones de ese sistema de juego. Me llamó mucho la atención que el juego se preocupara de ofrecer variedad siendo el primero de la saga, ya que muchas de las cosas que vemos son más propias de una secuela intentando aportar novedades. Pequeños minijuegos dentro de la historia en plan "no falles una sola letra" o "elimina todos los zombies en el tiempo estipulado". Además, contaremos con items muy curiosos que nos darán peculiares poderes como diccionarios que hacen que todas las palabras que nos van llegando durante un tiempo guarden una misma temática. También tendremos otros objetos que podremos usar como cócteles molotov ideales para cuando nos sintamos en peligro.

Cada fase tiene distintos jefes finales a los que derrotar que dan otro paso más en eso de sacar partido a la jugabilidad base de The Typing of the Dead. A veces requieren de velocidad, pero otras de precisión. Lucharemos contra jefes que nos golpearán si fallamos una letra, otros que nos arrojarán en pantalla enormes textos que debemos resolver antes de que se nos echen encima o incluso nos tendremos que enfrentar a un test de preguntas que evaluará nuestra capacidad de reacción. Como digo, The Typing of the Dead es extremadamente variado para tratarse de un juego que simplemente era un mod de The House of the Dead 2.

Carlos Sobera con tres cabezas

Mis dedos al terminar la saga

Pero The Typing of the Dead es, en el fondo, lo que todos estáis pensando: un juego gracioso. Ese típico juego que se sostiene por su peculiaridad y no por su calidad. Es cierto que esta vez esa peculiaridad es grandiosa, y se juega de una manera tan natural que llama la atención que nadie lo haya hecho antes (porque nadie lo ha hecho antes que yo sepa, pero si no es así iluminadme).

Es, digamos, un juego con un punto más por encima de lo anecdótico gracias a su variedad, pero que tampoco sale de esas sensaciones para convertirse en algo más grande. Desconozco si las secuelas y el popular The Typing of the Dead: Overkill aportan las suficientes novedades jugables como para tenerlos en todavía más consideración como juegos y no como "aprende jugando", pero las sensaciones de esta primera entrega ya veis que son muy positivas.

Vamos, que no va a resolveros la vida, pero os sentiréis dioses cuando os pongáis a escribir parrafadas que aniquilan hordas de zombies. Va a ser cierto eso que dicen de la fuerza de la palabra por encima de la violencia...