Scratches

Scratches es una aventura de terror desarrollada por Nucleosys, un pequeño estudio argentino que a día de hoy ya está muerto. El juego apareció en el 2006 y combina la aventura gráfica más clásica con el terror en primera persona.

Me gustan mucho los juegos de terror, y mucho más si su terror se basa en atmósferas que en sustos puntuales. Scratches pasó muy desapercibido para mí, hasta que me lo encontré unas cuantas veces en las listas de los juegos más terroríficos, sí, las que hacen por Youtube y que incluyen entre ellas cosas como Left 4 Dead y Resident Evil 5... En cuanto a miedo, no es para tanto ni mucho menos, y tan solo son dos los sustos contados, pero la atmosfera está bastante llena de intriga y misterio, y me recordó mucho a los relatos de Lovecraft (los pocos que he leído). Si eres un amante de ese tipo de literatura o simplemente te gustan las aventuras de terror, Scratches cumple su cometido de largo.

Yo me pasé todo el juego esperando un negro en bolas

Son muchos los puntos buenos de Scratches. La propia historia invita a jugarlo fácilmente. Encarnamos a un escritor que se recluye voluntariamente en una casa victoriana para encontrar la tranquilidad necesaria para elaborar el final que no consigue plasmar en su último libro. La casa tiene bastantes leyendas, por lo que para nuestro escritor es un plus de inspiración. Pronto todo se transforma en una especie de pesadilla para sí mismo, cuando llega a la casa y comprueba que no hay ni luz ni agua, y además está bien alejado de la civilización. Para colmo, Michael (se llama así) escucha muchos ruidos que provienen de la chimenea cuando llega la noche, unos arañazos que le llaman la atención y que acabarán siendo el principal motivo de su investigación.

La habitación de Michael

El juego sigue la estructura de las aventuras en primera persona clásicas, pero con la particularidad de sus entornos en 360º que hacen que situarse sea bastante más sencillo (así como marearse). La música y los efectos sonoros son dignos de mención, ayudando a todo tipo de situaciones que podáis imaginar y que recrean el terror que esperamos. A lo largo de la aventura encontraremos diarios y todo tipo de objetos que nos servirán para hacernos una idea de los misterios de la casa.

Todo lo bueno del juego es bastante evidente con lo que ya he dicho. Todo lo que penséis al respecto se producirá, pero el juego tiene serias deficiencias que hacen de él una experiencia menos placentera de lo que cabría esperar. Para empezar, su duración es muy corta, pero es algo que no se percibe debido a su extrema dificultad.

Sí, el juego es realmente enrevesado y complejo, o yo soy muy zote directamente. No es ya dificultad de tener que combinar cosas en el inventario, es ya la dificultad de que todo es bastante aleatorio. Es de esos juegos donde tienes que hacer determinadas cosas sin sentido para que el propio juego siga avanzando. Scratches se basa en un sistema de desencadenadores que necesitan ser activados para que el juego avance, independientemente de que lo que estés haciendo no tenga nada que ver con lo que viene a continuación. Es por ello que muchas veces no tendremos ni siquiera un objetivo en mente más allá que vagabundear revisando objetos por la casa por enésima vez. Jerry será nuestro mejor amigo, y prácticamente el único contacto que tendremos del exterior durante el juego. Si dudáis en algún momento del juego… llamadle. Muchas veces la cosa es tan estúpida como llamarle para decirle que no hay agua para que el juego pueda avanzar.

"Jerry, me pica el culo. Ayúdame"

Los gráficos están bien. He leído muchas veces que, dado que no es un juego precisamente antiguo, podrían haber hecho entornos dinámicos, pero la verdad es que tal como está no se echa de menos esa tecnología. La jugabilidad tampoco se resiente mucho, aunque muchas veces se presta a confusiones que dificultan nuestra investigación.

En cuanto a la historia, está bien. El final es un poco extraño y deja lugar a algunas preguntas. No quiero decir que sea un final abierto ni nada por el estilo, tan solo que te planteas cosas que ponen en entredicho todo el camino que has tenido que hacer. Más o menos el juego deja un buen sabor de boca por su historia, y un muy malo en su dificultad, en lo aleatorio y en lo anárquico de su estructura. Lo único que no me gustó fue el protagonista, el tal Michael, que realmente disfruta con el miedo que está pasando en esos momentos. Mientras tú estás bastante aterrorizado a dar dos pasos o a buscar la procedencia de los arañazos en las paredes, Michael se dedica a llamar a Jerry y a contarle lo emocionante que es todo y lo bien que se lo está pasando. Resumiendo, la historia merece la pena lo suficiente como para que sufrir todas esas carencias como juego merezca la pena.

Un gran juego, sobre todo para un género del que no hay muchos títulos. Merece la pena y desde luego hace que espere con cierto anhelo el juego Asylum, desarrollado por Senscape, compañía heredera de Nucleosys y comandada por Agustín Cordes.

PUNTUACIÓN

 6.5