NeoJin contra las visual novel: nuevo episodio.
Zeiva Inc (X-Note, Train of Afterlife) nos trae de forma gratuita el juego Voices from the Sea, al menos en su versión básica, ya que también se encuentra a disposición una versión Plus que añade a la obra voces para los personajes, galerías de personajes, fondos de pantalla y demás pijadas.
Es una visual novel extremadamente corta -menos de una hora- y casi nulamente rejugable donde las decisiones brillarán por su ausencia. Ya sabéis que estoy verde en el tema de las visual novel y tal, pero teniendo en cuenta las pocas que he jugado tengo claro que me gustan aquellas donde haya considerable interactividad. Así, por aquí habéis visto desfilar obras como Katawa Shoujo cuya interactividad dejaba mucho que desear y en el otro extremo Hatoful Boyfriend, cuya toma de decisiones me dejó claro lo que buscaba en una visual novel. La historia por supuesto es importante, pero creo que en este género primo más las posibilidades que ofrece que el argumento y desarrollo en sí.
¿Donde queda en Voices from the Sea? Pues en un extraño término medio. Si bien como digo la interactividad es nula, el hecho de que la historia sea aceptable y sobre todo su escasa duración lo convierten en una experiencia aceptable. El problema está en que Voices from the Sea me dura una hora más con ese sistema de juego y se acaba hundiendo en la puntuación, por lo que tampoco me he de dejar llevar como se ve en la nota por su duración -no da tiempo a cansarse de él- o por una historia resultona.
Cantus -el nombre más feo de la historia- es un chico de 13 años con un principio de antisocialidad, lo que le lleva a buscar continuamente la playa para relajarse de sus problemas. Si bien no se encuentra completamente aislado todo el mundo que le habla parece molestarle -en un símil con el ruido de un televisor-, y tan sólo parece cómodo cuando escucha el sonido del mar. Mientras sus compañeros de clase pasan las tardes jugando a videojuegos -hay que ver qué horribles chicos- Cantus prefiere buscar conchas en la playa. Y vaya si las encuentra, porque una de esas tardes llega a él una chica misteriosa que empieza a entablar conversación con él. La chica, que se llama Maris, promete trabajar durante siete días para conseguir la sonrisa de Cantus.
Podéis un poco imaginar gran parte de Voices from the Sea sólo con la introducción. Si bien es un juego que no te deja frío tampoco es que sea la última maravilla argumental y emocional. Quizá mi gélido corazón tampoco se derrita por culpa de su protagonista, Cantus, demasiado estereotipado. Es un chico que vive en su mundo, que no te mira a los ojos cuando habla y que pasa el día con unos gigantescos auriculares para oír música y aislarse del mundo preguntándose cuestiones existenciales. Es un tipo de personaje demasiado trillado ya, especialmente en todos los juegos del mismo tipo que he jugado.
Podría soportar cierta debilidad argumental, pero lo de ser una novela gráfica plenamente lineal me puede. Eso sí, podemos extender su vida recolectando las conchas que hay disponibles, a modo Pokémon de hacerse con todas. En cualquier caso, dicho proceso no alargará mucho la vida del título pues es algo que nos llevará unas tres partidas. Teniendo en cuenta que podemos pasar todos los diálogos rápidamente, en hora y media tendríamos el 100 %, aunque ya os digo que no merece en absoluto la pena.
No me llama mucho la atención, pero como es gratis es probable que le de una oportunidad.
ResponderEliminarBueno, es poco tiempo invertido, no arriesgas mucho ^^. Igual te llevas mejor sorpresa que la mía.
EliminarUffff.... yo tampoco puedo con las visual novel, y por tu texto, no va ser esta la que me haga cambiar de opinión.
ResponderEliminarUn saludo!
Puedes probar con Hatoful Boyfriend, parece una tontería pero de momento es la única con la que verdaderamente he disfrutado bastante. Lo bueno es que dura muy poco así que es bastante idónea para los que no acabamos de arrancar con el género xD
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