Final Fantasy II

¿El peor Final Fantasy?

Este análisis corresponde al remake de Final Fantasy II que apareció en Game Boy Advance bajo el título Dawn of Souls y que también incluía el primer Final Fantasy que ya visteis analizado. El remake añadía a la historia principal una última misión después de los acontecimientos de Final Fantasy II.

Remake vs original

Es muy llamativo que Square realizara un juego como Final Fantasy II. Un juego tan sumamente valiente aunque al final el resultado les saliera mal. La principal novedad a destacar es la ausencia de niveles. Ahora la experiencia se adquiere en función de lo que ocurre en las batallas. Así, obtendremos experiencia en defensa, en ataque, en magia y en cada uno de los atributos que incluye cada personaje, así como también la experiencia de las armas y escudos que equipemos.

Ésa es desgraciadamente una de las razones por las que me defraudó tanto este Final Fantasy II. La idea está bien, pero no está tan depurada como por ejemplo Dragon Quest IX (y sí, tengo en cuenta la diferencia de años). Si nos ponemos a subir niveles no sabremos si estamos perdiendo el tiempo o no, y nuestro único indicativo es la cantidad de vida máxima que tenemos. Además, si queremos especializar a alguien en la magia (fundamental en este juego) debemos estar continuamente los hechizos para subirlos de nivel, y os garantizo que es un proceso largo y tedioso teniendo en cuenta el poco PM inicial que tienen nuestros personajes.

A todo esto se le suman unas mazmorras bastante descompensadas, con enemigos muy difíciles y muy fáciles a la misma vez. Mucho peor es el incomprensible error de que se mezclan a veces en el mapa del mundo enemigos que no corresponden a la zona donde estamos (esto ocurre principalmente en las orillas y en los límites montañosos), por lo que es posible que nos enfrentemos a enemigos que todavía ni deberíamos haber visto. Desconozco si es un fallo del remake o pasaba también en el Final Fantasy II original. Para hacer todo menos atractivo, pasamos buena parte del juego con nuestros tres personajes principales y uno más que se nos va añadiendo en cada "capítulo", por lo que en ningún momento se nos invita a asentarnos en una zona y subir bien de nivel ya que pronto nuestro compañero abandonará el grupo.

Estas son las razones directas por las que Final Fantasy II me pareció un mal juego en comparación con el original y con el resto de la saga. Ya he jugado a bastantes como para otorgarle el titulo de "peor Final Fantasy" a menos que me lleve otra gran sorpresa negativa. Ya cuando salió el juego no cosechó todo lo que se esperaba de él, aunque sus numerosos remakes sí que han obtenido éxito de ventas y crítica.

La historia está mucho mejor llevada que en el primer Final Fantasy, también porque los personajes tienen ya su propio nombre y personalidad y no son meras clases que seleccionamos al empezar la partida. Vamos, que cuando empezamos Final Fantasy II tenemos esperanzas, vemos que el nuevo sistema de experiencia es "curioso" y no nos quejamos, pero a eso de las dos o tres horas después de unas cuantas de las injusticias mencionadas ya empezamos a pillarle manía.

Un último apunte de despedida referente a Dawn of Souls. A pesar de que Final Fantasy II deja algo que desear como remake son dos juegos que merecen la pena. Van más allá del remake visual y alguna mejora aquí y allá y añaden partes jugables bastante interesantes. No sé si lo suficiente como para alguien que se tenga machacados ambos juegos pero sí para alguien que quiera empezar con los Final Fantasy.

Consulta aquí el análisis de Final Fantasy.