THE ALTERS - PRIMERAS IMPRESIONES

 

Holly Dolly!

The Alters está a la vuelta de la esquina. Mañana mismo podéis disfrutar de lo nuevo de 11 bit Studios, una compañía que por aquí siempre suele recibir buenas puntuaciones. Sin embargo, esta vez, no he llegado a tiempo a la fecha marcada para el levantamiento del embargo y tiro del comodín de las primeras impresiones para dar unas pequeñas pinceladas antes de que acabe trayendo el análisis completo.

¿Por qué os estoy contando esto? Porque creo que el mero hecho de no haber sido capaz de llegar a las fechas marcadas es, de hecho, uno de los mejores ejemplos que puedo deciros sobre cómo es The Alters. Es un juego muy profundo, que desarrolla un montón de mecánicas que casan sorpresivamente bien, al menos en lo que llevo jugado. Si bien llevo ya un buen rato, tengo la sensación de que me esperan un montón de nuevas sorpresas conforme voy jugando, aunque también hay margen para que muchas de sus ideas se queden en meras pinceladas.

La premisa, por si alguien anda perdido, es inmejorable. Encarnamos a un único superviviente en un planeta hostil que, tras llegar con vida gracias a su cápsula de escape, ha de hacer frente a su propia supervivencia. Para ello, él mismo no será suficiente, por lo que se ve obligado a clonarse con el fin de obtener suficiente fuerza de trabajo y poder llevar todas las tareas que requiere la gestión y mantenimiento de la base. Si la idea ya resulta atractiva, 11 bit Studios le pega el giro definitivo y es que, sí, nos clonamos, pero no a nosotros mismos como tal, sino a versiones alternativas de nuestro yo, en un proceso llamado ramificación. Se nos pondrá delante nuestra vida, nuestros recuerdos, y sobre ellos la posibilidad de cambiar las decisiones más importantes del pasado, de manera que nuestra línea temporal se ramifica arrojando nuevas versiones alternativas de nosotros mismos que son las que finalmente traemos a nuestra línea temporal, siempre por medio de la clonación -nada de viajes entre universos-.

Como podéis intuir, empiezan a entrar en juego conflictos morales y, sobre todo, un difícil proceso de integración de todos estos "alters". No es sorpresa que los clones que vas creando no se toman muy bien el hecho de descubrir que no son los originales, sino versiones alternativas de ti, que sí eres el original -o al menos así lo dice tu sentido común-. Esto da lugar a numerosas discusiones y posibilidad de rebeliones, que te forzarán a tener un especial tacto con cada uno de estos alters con los que estás obligado a convivir.

Así, por delante tienes un juego de administración de recursos un poco estilo Fallout Shelter, de personalización de la base con incorporación de módulos que funciona bastante bien, y a la misma vez un juego mucho más profundo, lleno de toma de decisiones y de gestión de relaciones entre los protagonistas, los cuales van cambiando de parecer según tus actos. Todo funciona bastante bien, al menos de primeras, porque siento que todavía no he visto todas las capas que este sistema tiene, y siempre me quedo con la sensación de no saber si mis decisiones importan o, simplemente, están haciéndome creer que es así.

Por lo demás, el juego está un poquito verde. El rendimiento es un tanto irregular de más, y esto casa con la cantidad de veces que el juego se ha ido retrasando. También siento que está verde en cuanto a estructura, ya que le falta empaque a la hora de otorgar una narrativa que esté a la altura de lo que está pasando. Por ejemplo, nada más empezar la partida, tu primera orden es encontrar el protocolo de supervivencia, para luego recibir una segunda orden a través de la interfaz sobre recoger una cantidad determinada de un recurso concreto. ¿Para qué? Pues no lo sabes, al menos hasta que no cumples el objetivo y te aparece el siguiente. En definitiva, demasiada sensación de que está hecho el esqueleto del juego, pero que no ha dado tiempo a darle un mayor sentido a los pasos que vamos dando para avanzar. Hacía lo que me pedían, como un robot, sin tener claro para qué daba cada paso.

Intentaré no demorar el análisis de The Alters, pero veo tanta capa que no garantizo que lo tengáis pronto. Lo que llevo es, desde luego, más que prometedor, y no tengo dudas de que es uno de los juegos más originales en premisa de los últimos tiempos, pero no sé hasta qué punto, cuando lo termine, seguirá siendo simplemente un juego con una atractiva premisa o si de verdad han conseguido darle el empaque suficiente.

Clave de producto proporcionada por 11 bit Studios.