Gran Hermano 14. Gala 9

Llegó la gala que todos esperábamos desde hace tiempo, esa gala que hay en todo Gran Hermano que marca un poco el devenir del concurso. Por supuesto, ahora entramos una nueva etapa en la que el concurso intenta mantener la llama de la audiencia de las maneras más extrañas posibles (y legales, todo sea dicho, que para eso ellos inventan el programa). Míriam fue expulsada, y aunque es lo que todos queríamos (y pese a que los gemelos se han tirado toda la semana intentando evitarlo) no podemos sentir una plenitud total, y es que el concurso ahora se ha quedado bastante soso.

El rey ha muerto...

Ni siquiera la aparición de dos nuevos concursantes, Saray e Iván, conseguirán tapar este gran agujero que se nos queda. Ay, ¿os acordáis cuando los concursantes entraban por pasar un casting y no por ser ex novio/a o novio/a de alguien? ¡Qué tiempos! Resulta que la tal Saray entró a Gran Hermano con el fin de joder la vida a su ex novio. Sí, no me voy a andar con rodeos, el ex novio es por supuesto Iván. Al parecer el chico se quedó a las puertas de entrar en el concurso, y ella, en un video lleno de rencor y despecho, asegura que quiere fastidiar a su ex novio entrando en Gran Hermano y consiguiendo por ende lo que él no pudo conseguir, de manera que no pudiera ver la tele porque iba a estar ella las 24 horas del día. ¡Dí que sí Saray! ¡Superándolo maduramente! Iván apareció, y Saray se convirtió en una dulce chica que se reía con cara de tonta y que hasta le ponía ojitos. Iván, mucho más distante y fastidiado, según tengo entendido ahora tiene nueva novia. Igual me estoy equivocando, pero creo que lo dijo un par de veces. No me gusta ni uno ni otro (especial énfasis en el "uno").

... larga vida al rey

Desi y Anabel son insoportables. Me da igual que toda España esté con ellas porque son lo peor. Bueno, en verdad Anabel no me ha hecho nada más que ser ella misma. Mi único "problema" con ella es que me cae muy mal, rematadamente mal, pero no ha hecho nada de excesiva gravedad. Desi es otro caso, y es que si fuera cualquier otra persona de la casa la gente la odiaría mucho más. Desde que entró (incluso antes, que en la semana con Adrián ya despotricaba) ha insultado de manera activa a la mayoría de mujeres de la casa, con bonitos adjetivos como calientapollas o zorrón (o zorrasca, o alguno de esos derivados tan contundentes en sonoridad). Pero claro, es Desi, y Desi hace gracia, y como es travesti nos reímos no vaya a ser que digan que somos intolerantes. Seguro que Anabel también se ríe mucho cuando se entere de que la ha nominado habiendo en la casa un montón de gente con la que casi ni se habla mientras que su amiga ha sido su compañera de jacuzzi.

Traiciones de jacuzzi

Los gemelos nominados disciplinariamente y Desi, Anabel y Yessi (que me cae bastante bien, todo sea dicho) nominadas por sus compañeros. Susana nominada pero salvada in extremis. Juan Carlos haciendo un sosísimo striptease... ¡Qué nos importa esto! Lo que queréis es jaleo, lógico, y más o menos lo tuvisteis, porque Mercedes Milá hizo una entrevista muy sosa, muy relajada y muy poco apropiada. A veces sacó el genio y brotó la esperanza, pero bueno, la verdad es que pudo ser peor. Lo que está claro es que si Miriam llega a ser un hombre yo creo que la Milá hasta pide su expulsión.

Se habla mucho del daño que se le hace a la gente que está dentro de la casa con información del exterior, pero creo que nunca hemos oído hablar del dolor que se hace desde el interior hacia nuestro querido exterior. Son daños distintos, y la verdad es que no tengo muy claro con cual quedarme. La impotencia es el único sentimiento común que existe entre esas dos verdades. Cuando recibes un golpetazo del exterior como el que Miriam le endosó a Igor tienes la impotencia de no tener ni idea de lo que está pasando ahí fuera, y sobre todo la impotencia de no poder hacer nada por cambiarlo. En cambio Miguel, desde el exterior, tuvo que sufrir algo sin duda más doloroso, la información que del interior llegaba a nuestro exterior. Ese refrote continuo de tu mujer con un hombre que iba más allá de eso y se traducía en palabras y afirmaciones mucho más hirientes que cualquier rozamiento casual. La impotencia aquí es más cercana a la rabia, la de no poder entrar a quemar la casa de Guadalix como mínimo, pero ésta va acompañada de retroalimentación, porque día tras día enciendes la tele para volver a encontrarte el mismo panorama y te acabas envenenando. Igor, como mucho, se comerá la cabeza delante de toda España, pero lo que ha tenido que soportar Miguel sólo se puede atisbar.

El mensaje de Miriam a Igor fue duro, muy duro. Cuando a Miriam le pusieron el video en el que Igor la traicionaba dejándola fatal ésta reaccionó de la manera más ciega (y esperada) posible. Defendió a Igor y dijo que se esperaba todo lo que había visto. Esos vídeos de Igor yendo uno a uno a todos los compañeros de la casa a decirles que Miriam le había básicamente tocado el pito. No sé si en algún corte publicitario fue asesorada por la madre en modo "hija, tienes que mostrarte decepcionada con Igor si quieres recuperar a tu esposo" o porque realmente se dio cuenta, Miriam acabó entrando en razón y a la hora de despedirse se fue despidiendo uno por uno con palabras cariñosas de todos los concursantes, hasta que le llegó el turno a Igor, al cual le dedicó entre lágrimas un "me has hecho pasarlo muy bien dentro, pero no tanto fuera, un besi". Todo con silencios dramáticos, vamos, que no fue tan frío como parece al leerlo. La floja entrevista mereció la pena sólo por aguantar hasta ese momentazo que destrozó a Igor (teóricamente).

Miriam hablando con su madre en publicidad

Pero no es todo culpa de que la Milá este año no tenga ganas de guerra, es culpa también de que la propia Miriam no estaba muy cuerda en esos momentos. Miriam es ahora mismo un barco encallado en la Isla del Giglio. No sabe qué hacer, y cuando salió tomó la peor de las posibilidades. Veía sus vídeos con risa, pero he de deciros que es una risa sincera. De verdad que me creo que le diera risa oírse a sí misma decir que entre Igor y ella no había nada, porque le sonaría increíblemente estúpido. Miriam atravesó un punto de locura que la gente evidentemente no supo comprender, e imagino que Miguel tampoco. Si ya cuesta entenderlo en frío imaginad en caliente. Eso sí, no os sé explicar por qué lloró más cuando vio a Igor recibir el peluche de su hijo que cuando vio el momento en el que Miguel hacía el tonto bailando para decirle que estaba en Gran Hermano. Imaginad que se hunde en ese momento (recordad que está encallada), yo creo que Miguel se casa esta misma noche. Aún así, si tuviera que jugarme todos mis ahorros (1'50€) creo que apostaría a que vuelven a estar juntos. La boda desde luego no, porque además de que es improbable que Miguel recaiga tan pronto, la sociedad que tan del lado de Miguel se ha puesto se sentiría estafada, pero en un tiempo... Eso sí, las cosas se están posicionando en una reyerta del tipo hija+suegra vs novio que en su día era perfecto pero que ahora que mi hija le toca el pito a Igor ya no le conviene. ¿Os acordáis cuando habló por primera vez la madre de Miriam y dijo aquello de que no reconocía a su hija y que a ver si se le iba la tontería ya con el Igor? Ay...

My heart will go on

Espero que hayáis disfrutado mucho de la gala porque no creo que tengamos nada muy divertido en los próximos días (semanas). Sabiendo como ha dejado Miriam a Igor podéis estar seguros de que si Igor sigue en la casa, en Gran Hermano se las ingeniarán para que Miriam vuelva a hablar con él antes de su salida. De momento nos queda la expulsión de los gemelos bastante clara del siguiente Lunes y un montón de semanas más hasta que el concurso se ponga competitivo y la gente empiece a concursar para ganar.